En reclamo por viviendas, unas 30 familias desde el miércoles usurpan un terreno ubicado en Benavidez y Necochea, en Chimbas. Hasta el cierre de esta edición estaba al salir una orden judicial para el desalojo de la propiedad que es privada y permanecía hace años abandonada. El intendente Mario Tello dijo que desde el municipio se está trabajando en el tema habitacional pero que lamentablemente no pueden satisfacer la gran demanda de techos y aconsejó a los vecinos que desistieran de la ocupación y tuvieran paciencia hasta que llegue alguna ayuda oficial por los canales "normales", a través de los planes del IPV.

Los usurpadores -se vio unas 30 familias, ellos dicen que son más de 100- instalaron carpas y estructuras de nylon con palos y hasta delimitaron el predio, de más de una hectárea de extensión, marcando pequeños terrenos de unos 10 metros de frente por 15 de largo. Allí pernoctan y pasan al rayo del Sol el día desde el miércoles, en un grupo en su mayoría conformado por mujeres y niños.

Una de las voceras del grupo, Vanesa Garin, dijo que son autoconvocados de diferentes lugares chimberos como el loteo Virgen de Fátima y Barrio Los Andes, que viven hacinados junto a sus familiares y que no tienen techo propio. "Nosotros tenemos necesidad y vemos que benefician a mucha gente que no es de Chimbas con casas en Chimbas", aseguró. Agregó que están dispuestos a pagar una cuota por una casa o un terreno y que están dispuestos a escuchar cualquier otra solución habitacional.

Tello dijo que entiende las necesidades pero rechazó el tipo de reclamo. "Yo no aliento las usurpaciones, yo les digo que vamos a seguir trabajando pero no es ese el camino. Y el gobernador tampoco comparte este método", dijo el intendente. Agregó que él cree que la ocupación es una reacción a que está muy avanzado el trabajo con la cercana Villa del Sur, de unas 300 familias, a quienes buscan contemplar en planes nacionales de vivienda. Y que los que reclaman ahora son familiares de ese asentamiento que quieren que los incluyan. Los usurpadores negaron esta relación.

El jefe comunal sostuvo que el terreno sería de propiedad de la firma Ceramil, en proceso de quiebra y que ya se hizo la denuncia para que actúe la Justicia en el desalojo. Los vecinos dijeron que la policía se acercó en más de una oportunidad a intimarlos de que deben irse pero que resistirán cualquier intento de sacarlos por la fuerza.