Con el balotaje ya fuera de escena tras la decisión del arquitecto Jorge Cocinero de declinar su participación, el rector Tadeo Berenguer cerró el capítulo electoral y se metió de lleno en lo que será su segundo mandato al frente de la Universidad Nacional de San Juan. En diálogo exclusivo con DIARIO DE CUYO web, el reelecto titular de la UNSJ puso el foco en la agenda de gestión que viene, marcada por la necesidad de modernizar estructuras, profundizar el vínculo con el territorio y pelear contra la incertidumbre presupuestaria.
“Las campañas son apasionantes, pero también desgastantes. Y a veces, para diferenciarnos, se dicen cosas que no reflejan todo. Con Cocinero hablamos esta mañana por teléfono, coincidimos en que no tenía sentido seguir exponiendo a la comunidad universitaria a otra semana más de confrontación. Ahora ya todos a trabajar, cada uno en su lugar”, planteó Berenguer, que logró más del 47% de los votos en la elección del pasado miércoles.
La nueva etapa que se inicia lo encuentra con una hoja de ruta definida: “Queremos adecuar estructuras que hoy están desactualizadas, muchas vienen de los años 80. La universidad ha cambiado, el contexto ha cambiado. Necesitamos fortalecer áreas académicas, científicas, tecnológicas y de vinculación con el medio”, enumeró.
Además, el rector reelecto marcó como prioritario expandir la presencia territorial de la UNSJ: “La universidad pública no puede estar solo en el conurbano de la Ciudad de San Juan. Tiene que llegar a los departamentos, trabajar con los municipios, con el Gobierno provincial, ofrecer carreras a distancia y crear nuevas propuestas que respondan a lo que necesita la comunidad”.
Sin embargo, Berenguer no evitó referirse a uno de los principales obstáculos que enfrenta la gestión: la falta de previsibilidad financiera. “Nosotros no tenemos presupuesto nacional aprobado. Llevamos dos años funcionando con prórrogas y ajustes periódicos definidos por el Ejecutivo, sin intervención del Congreso. Eso es una dificultad enorme”, advirtió.
Y fue más allá en su crítica al Gobierno nacional: “Quemamos energía todos los meses para ver qué transferencias llegan y cuánto nos ajustan. En vez de planificar a largo plazo, estamos apagando incendios. Y lo más grave es que lo hacemos frente a un gobierno que, no un poco, sino bastante, desacredita el sistema universitario y el sistema de ciencia y técnica. Justamente lo que nosotros impulsamos”.
Aun así, el rector apuesta a sostener una gestión de puertas abiertas, diálogo y consenso. “Ese fue el sello de estos cuatro años, y lo vamos a profundizar. Sabemos que el camino es con la comunidad universitaria, como hasta ahora”.