El mousse de arándanos es una opción fresca y liviana para quienes buscan postres saludables y fáciles de preparar. En esta receta, es clave el uso de licuadora. Este electrodoméstico simplifica buena parte del proceso de elaboración.

Esta receta no necesita azúcar añadida y se basa en solo tres ingredientes. Es ideal para aprovechar los antioxidantes de los arándanos y obtener una textura suave sin recurrir a crema o preparaciones más pesadas.

La receta para hacer un mousse de arándanos casero

Esta receta se puede preparar en pocos minutos y conservar en la heladera. Así puede servir como un postre para una merienda o durante una ocasión especial para compartir. Al momento de hacer este mousse de arándanos, es necesario:

Ingredientes: alcanzan para 2 porciones

  • 1 taza de arándanos frescos o congelados.
  • 1 yogur natural sin azúcar: puede ser descremado, griego o vegetal.
  • 1 cucharada de miel, sirope de agave o el edulcorante de preferencia: agregar a gusto.

Paso a paso: cómo hacer un mousse de arándanos en casa

  1. Lavar los arándanos si son frescos; si están congelados, usarlos directamente.
  2. Ponerlos en la licuadora junto con el yogur y el endulzante elegido.
  3. Licuar hasta obtener una mezcla suave, homogénea y ligeramente espumosa.
  4. Llevar la preparación a la heladera durante al menos 1 hora para que tome consistencia.
  5. Servir en copas individuales y decorar con arándanos frescos, menta o semillas.

En cuanto a nivel calórico, esta preparación resulta más liviana que el mousse tradicional. Una porción puede ubicarse entre 90 y 130 calorías, dependiendo del tipo de yogur y del endulzante utilizado.

Es una alternativa ideal para quienes buscan reducir el azúcar sin resignar sabor. También sirve para incorporar antioxidantes, a través de la fruta.