La mesa navideña siempre deja una variedad de sabores que, al día siguiente, encuentran una nueva vida en la cocina. Aprovechar lo que sobra evita el desperdicio y también es una invitación directa a la creatividad para compartir en familia.
Con apenas unos ingredientes básicos y los restos de la cena, el menú puede ser variado e ideal para el clima distendido de estos días.
Con técnicas simples y pocos minutos de trabajo, los platos que sobran en la mesa familiar se transforman en opciones frescas que nadie espera.
El sándwich de vitel toné que resuelve el almuerzo en minutos
Esta opción aprovecha la terneza de la carne y la cremosidad de la salsa que ya están listas en la heladera. El tiempo de preparación es veloz: solo lleva cinco minutos de armado y otros cinco si existe el gusto de tostar el pan.
Ingredientes:
- Rodajas de peceto de vitel toné.
- Salsa de vitel toné.
- Pan a elección (lactal, baguette o ciabatta).
- Hojas de rúcula, lechuga o espinaca (opcional).
- Tomate en rodajas (opcional).
- Aros de cebolla morada (opcional).
- Un chorrito de aceite de oliva (opcional).
Paso a paso:
- Cortás el pan a la medida que más te guste y lo tostás si preferís un toque crujiente.
- Untás una de las tapas con una capa generosa de salsa de vitel toné.
- Acomodás las rodajas de carne sobre la salsa.
- Agregás las hojas verdes, el tomate y la cebolla para sumar frescura.
- Tapás con la otra mitad del pan y presionás suavemente para que los sabores se unan.
- Servís el sándwich inmediatamente con un extra de salsa o ensalada.
Croquetas de carne y puré de papas
Las croquetas son la solución perfecta porque permiten jugar con lo que hay disponible, ya sea queso, cebolla o hierbas frescas. El proceso completo, entre el armado y la fritura, demanda alrededor de 50 minutos.
Ingredientes:
- 300 gramos de carne asada desmenuzada (vaca, pollo o cerdo).
- 300 gramos de puré de papas.
- 2 huevos.
- Media taza de queso rallado (opcional).
- Una cebolla pequeña picada y salteada (opcional).
- Perejil picado, sal y pimienta a gusto.
- Pan rallado en cantidad necesaria.
- Aceite para freír.
Paso a paso:
- En un recipiente, mezclás la carne con el puré, un huevo, el queso, la cebolla y el perejil.
- Condimentás la masa con sal y pimienta según tu preferencia.
- Armás bolitas o formas de croquetas con las manos.
- Pasás cada unidad por huevo batido y después por el pan rallado.
- Dejás que las croquetas descansen en la heladera por unos 20 minutos para que tomen firmeza.
- Calentás el aceite y freís hasta que la superficie esté dorada. Escurrís en papel absorbente y servís el plato bien caliente.
La tarta ideal para aprovechar la ensalada rusa
Cuando los recipientes con ensalada y pollo todavía están llenos, la tarta es la salida más inteligente. Esta preparación es tan versátil que se disfruta igual tanto fría como caliente. El tiempo de horneado es de 35 minutos aproximadamente.
Ingredientes:
- Una tapa de masa para tarta.
- 300 gramos de pollo cocido y desmenuzado.
- 400 gramos de ensalada rusa (papa, zanahoria, arvejas y mayonesa).
- 2 huevos.
- 100 gramos de queso (rallado o en cubos).
- Sal, pimienta y nuez moscada.
Paso a paso:
- En un bol grande, unís el pollo, la ensalada rusa, los huevos y el queso.
- Sumás la sal, la pimienta y el toque de nuez moscada para realzar el sabor.
- Forrás una tartera con la masa de tu preferencia.
- Volcás todo el relleno y emparejás con una cuchara.
- Llevás al horno a 200° C durante 35 minutos hasta que la masa esté dorada y el relleno se sienta firme.
- Esperás a que se entibie un poco y ya está lista para la mesa.