Muy activa en las redes sociales, Ivana Nadal suele realizar profundas reflexiones sobre el amor propio, la superación y la aceptación para sus más de dos millones y medio de seguidores que son fieles a la expanelista de “Bendita”.

Hace unos años Nadal fue víctima de un hacker que viralizó un video íntimo de la morocha y por ese motivo no la pasó muy bien: "Hoy en día afrontaría desde otro lado lo que pasó. Diría que (masturbarse) es lo más normal del mundo y que hasta la mujer que me está insultando seguramente llora cada vez que se toca porque se siente sucia. Pero es hermoso tocarse. Es hermoso hacer llegar a tu cuerpo a niveles de éxtasis tan zarpados como el sexo. Está buenísimo, hay que vivirlo y no hay que sentir vergüenza, y nadie tiene derecho a meterse adentro de tu intimidad, ni de mostrar lo que vos no quieras", aseguró Nadal en Basta Chicos Podcast, recordando la situación que la avergonzó en el pasado.

Luego recordó cómo se sintió en ese momento: "Así que la culpa no era mía, era del otro chabón (el que viralizó las imágenes) y de toda la gente que me acusaba. Lo superé, obviamente. Pero en ese momento, yo en lugar de pensar 'de qué carajo se asombran, es solamente una mujer tocándose su parte íntima, nada más y nada menos', yo me sentía culpable, me sentía sucia, avergonzada. No podía ni pensar en besarme con una persona, me daba vergüenza, me dolía la panza. Todo pasó por algo", dijo emocionada.

Luego agregó: "Sí la pasé mal, fue horrible que se haya filtrado algo de mi intimidad, pero por muchos sentidos. No simplemente por el hecho de que me hayan visto en un lugar tan vulnerable. Primero que era cero estético, ¡hubieran filtrado algo más lindo (risas)! Después, que me habían ofrecido un montón de plata revistas por desnudos, antes de que salga eso y siempre había dicho que no. Decís 'la pu... que me parió', hubiese aceptado y habría hecho fotos súper lindas y encima me daban guita", lanzó.

"Me pasa de decir: 'Qué mierda fui, cómo yo también era parte de esa mierda'. Un poco me enojo con esa Ivana, pero está bien que haya pasado para cambiar. Hoy me defino humana, empática y luchadora", concluyó.