Hace exactamente 10 años, los nombres de las hermanas Wanda y Zaira Nara comenzaban a sonar con fuerza mientras ellas construían sus carreras por caminos distintos. Por entonces con 21 años, la rubia era la vedette mediática y decía ser virgen, mientras que la morocha de 19 integraba la nueva camada de modelos.

Por aquel entonces Wanda era la popular. Lo Zaira Nara era distinto, la hermana menor prefería agachar la cabeza cuando aparecía un paparazzi: los únicos flashes que le agradaban eran aquellos que se disparaban cuando estaba sobre una pasarela.

No obstante Wanda y Zaira -que tenían sus semanas de odios y peleas pero también sus días de amor y complicidad, como todos los hermanos- podían eventualmente coincidir en un evento patrocinado. Esas ocasiones eran contadas. Y no hay demasiados registros. No obstante Teleshow rescató del archivo estas fotos, sacadas diez años atrás.

                                                            

En este tiempo Wanda se casó, se divorció, se volvió a casar, fue mamá ¡en cinco ocasiones!, colgó las plumas y el conchero del teatro de revista para ser empresaria del fútbol en Italia, donde pasa sus lujosos días. Y sin querer queriendo, hasta propició un nuevo verbo: icardear.

Zaira no dio el sí ("¡Menos mal que no me casé!", suspiró sobre su frustrada boda con el futbolista charrúa Diego Forlán), anduvo de novia varias veces (como con Pico Mónaco), luego se enamoró de un aristócrata, Jakob von Plessen, con quien fue mamá. Siguió con el modelaje pero se probó como conductora, y se distanció de su papá -así como lo hizo Wanda- cuando Andrés apareció en escena con una tal Cari Nara.

Fuente: Teleshow