Buenos Aires 7 de septiembre.- Benjamín Vicuña está pasando por un excelente momento laboral. El actor divide su tiempo entre las grabaciones de Farsantes y la obra teatral Los elegidos. Además viaja a Chile todas las semanas para hacer la segunda temporada de Prófugos, una serie de HBO.

"Es una agenda movida: lunes y martes en Chile, en Santiago, y los miércoles vuelvo a Argentina. ¿Cuándo descanso? A la noche, como todos los seres humanos. Acá se da examen siempre, y eso no es malo, por eso concentrarse es importante para mí. Hay períodos de mucho trabajo, y a veces estás dos meses sin que te llamen a tu casa.Hay que saber equilibrar para poder tener una vida y cuidar a tu familia", aseguró la pareja de Carolina "Pampita" Ardohaín al diario Perfil.

En la tira Farsantes, Vicuña interpreta a Pedro, un abogado que se enamora de un colega, Guillermo (Julio Chávez). El problema es que él está casado y le cuesta aceptar su homosexualidad. La semana pasada, ellos se dieron un primer beso, que fue muy comentado en los programas de televisión y en las redes sociales.

"Farsantes ha logrado instalar en Argentina el mundo de la homosexualidad, en toda su complejidad (como cualquier amor) y en toda su contemporaneidad (porque es nuevo esto que pasa en la serie y cómo la gente se engancha)", afirmó Benjamín en cuanto a la historia que se narra en la ficción de Pol-ka.

Además, destacó que Prófugos también toca temas reales como la corrupción: "En Prófugos se habla, además del género, del poder, de la corrupción, sobre lo dañado o no de las instituciones, del narcotráfico. Ambos proyectos pueden dar cuenta, por suerte y agradezco, de mi perfil como actor hoy".

Por último, el actor afirmó que "tiene un perfil político" y que elige muy bien en qué proyectos va a trabajar: "Yo creo que uno como actor tiene un perfil político, que obviamente no se da en un sentido de político dueño de una responsabilidad civil. Pero sí lo siento en cuanto a que uno puede aportar, y mucho, desde el instalar un tema y un debate. O al mostrar lo que no se mostraba. Romper un poco el muro y que el trabajo de uno signifique.Trato de elegir proyectos que tengan aspiraciones (y gracias a Dios puedo elegir) de instalar un ruido, de crear un debate, de si es posible instalar una discusión. Sin sonar pretencioso, ojalá generar un sincero y concreto aporte, modificar algo una realidad".