"Vamos a ser inflexibles", dijo el secretario de Seguridad, Carlos Munisaga, sobre la forma en que actuarán en caso de que se produzca alguna usurpación de terrenos en San Juan. Esto, en el contexto de la problemática que crece en varias provincias del país y luego de que en el departamento Sarmiento se impidiera una toma. En este sentido, el funcionario dijo que desde la Secretaría dieron la orden, a todas las comisarías de la provincia, de que intensifiquen los controles para poder evitar que estos delitos se lleven a cabo. "Vamos a ser inflexibles con las tomas de tierras. No vamos a permitir nada fuera de la ley", dijo Munisaga y comentó que endurecerán las multas y que están buscando las herramientas legales para excluir de los padrones del IPV a las personas que sean parte de estas tomas ilegales.

En Buenos Aires ya fueron usurpadas 4.300 hectáreas en diferentes zonas. En Mar del Plata y otros rincones de la costa argentina, los dueños de casas están desesperados por la cantidad de tomas que hay. Río Negro, Córdoba, Santa Fe y Mendoza también son parte de esta problemática. Y mientras en algunos lugares se pidió a los efectivos policiales que no saquen a la gente de esos lugares, en San Juan la decisión es totalmente opuesta. "La usurpación es un delito. Ya se habló con los intendentes de los departamentos para que ellos nos informen de inmediato de algún rumor o intento de toma", dijo Munisaga sobre la metodología que aplicará la provincia ante esta tendencia que parece que va en aumento en el país. Además, agregó que dieron la orden a la Policía de San Juan para que "levante" las tomas cuando sucedan.

"Apenas sepamos de una usurpación levantaremos todo e iniciaremos el proceso en Flagrancia. Incluso, estamos viendo la forma de lograr la exclusión del padrón del IPV y de otros beneficios que esas personas pudieran recibir del Estado", agregó enfáticamente el funcionario y resaltó que todas las comisarías están al tanto de esta orden, porque la idea es neutralizar las tomas antes de que se lleven a cabo. Es que, según resaltó el funcionario, la usurpación constituye un delito contra la propiedad y se encuentra tipificada por el artículo 181 del Código Penal, que dice: "Será reprimido con prisión de seis meses a tres años el que por violencia, amenazas, engaños, abusos de confianza o clandestinidad despojare a otro, total o parcialmente, de la posesión o tenencia de un inmueble o del ejercicio de un derecho real constituido sobre él, sea que el despojo se produzca invadiendo el inmueble, manteniéndose en él o expulsando a los ocupantes. El que, para apoderarse de todo o parte de un inmueble, destruyere o alterare los términos o límites del mismo. Y, el que, con violencias o amenazas, turbare la posesión o tenencia de un inmueble".

Incluso, en San Juan este delito está contemplado en el procedimiento especial de Flagrancia. Es decir que se puede detener a las personas que descubran usurpando inmuebles y someterlas a una causa y juicio penal.

A pesar de que la idea es evitar que se llegue a esta actuación, Munisaga reiteró en varias oportunidades que serán rigurosos. Es por esto, que las recorridas por las zonas donde haya baldíos serán más frecuentes. "La Policía está muy atenta y por eso aumentamos los patrullajes", agregó y dijo que en Sarmiento lograron frenar una usurpación gracias al aviso que recibieron desde la comisaría. "Ya tenían hasta las estacas puestas para dividir las tierras", concluyó.

EN SAN JUAN

  • Ya hubo un intento fallido de toma

El miércoles pasado cinco hectáreas de un terreno de Media Agua fueron el blanco de un intento de toma. Según fuentes oficiales el baldío, que pertenece a un finquero, está ubicado detrás del barrio Santa Teresita y cerca del barrio Sarmiento y se lo puede dividir en unos 40 lotes. Esta usurpación, que al parecer estaba pronta a ser concretada pues el lugar ya tenía las estacas y las bases, no se logró gracias a la intervención de la Policía y la Municipalidad de Sarmiento.

Según Munisaga, luego de que el intendente de Sarmiento, Mario Martín, informara de ese intento de toma, personal policial fue a la zona para frenarlo. No encontraron personas en el terreno, pero igual la Policía decidió dejar un guardia para evitar que esa usurpación se concrete.

EN CAPITAL

  • Intimaciones para evitar problemas

En el marco del reclamo que hicieron vecinos de Capital por el aumento de basurales o terrenos que son usurpados por gente que vive en situación de calle, la Municipalidad de la Capital hizo un relevamiento de los terrenos baldíos que hay en el departamento, con el objetivo de que sean acondicionados. Es por esto que pusieron en marcha un plan de regularización de situación de los terrenos baldíos que incluye multas de hasta $250.000 para aquellos que contienen basura y no cuentan con cierre perimetral ni veredas, tal como lo establece una ordenanza municipal. Tras un relevamiento se detectaron 1.600 terrenos de este tipo en infracción y la Justicia ya emitió más de 100 sentencias monitorias para regularizar la situación de estas parcelas.

EN ARGENTINA

  • Hasta protestas para frenar a los usurpadores

Con piedras, palos, maderas y nailon levantan las precarias viviendas en pocos días. Se instalan y se quedan en esos lotes como si fueran los propietarios; y generan mucho descontento en gran parte de la sociedad. Esta postal se repite día a día en varias provincias del país. Es que, en medio de la crisis económica que vive Argentina por la pandemia de coronavirus, la usurpación de terrenos o barrios que aún no fueron entregados que están deshabitados se volvieron un gran problema. Incluso, en la costa argentina y en otros rincones turísticos como Bariloche o El Bolsón hubo usurpaciones de casas que están deshabitadas, pues son para recibir turistas. Esta realidad hizo que en muchos rincones del país la gente se manifieste y salga a la calle a pedir que esto se detenga. En la costa, los dueños de propiedades privadas hicieron el viernes una caravana, porque sumado a las tomas, los controles policiales para frenar la circulación de gente por la pandemia no los deja llegar hasta sus casas para saber si fueron blanco del delito.

Una de las zonas más afectadas por las tomas ilegales de terrenos es la provincia de Buenos Aires. Según medios nacionales, ya fueron tomadas unas 4.300 hectáreas de tierras fiscales y privadas. Dicen que usurparon predios donde se iba a construir barrios cerrados y otros complejos de viviendas sociales que estaban por ser entregadas. En esta zona, a diferencia del Sur argentino, donde las usurpaciones tienen que ver con reclamos de comunidades mapuches, la mayoría de los usurpadores dijo a los medios nacionales que la necesidad habitacional los lleva a cometer este delito.