Largas charlas. Hubo chicos que recorrieron varias casas y otros que hicieron pocas visitas. Es que hubo grupos que tuvieron largas charlas con los vecinos de la Villa Mariano Moreno.


Ayer comenzó la 29na Asamblea Federal de la Acción Católica Argentina y las misiones en distintos rincones sanjuaninos fueron unos de los objetivos de la primera jornada de esta fiesta de fe. La Villa Mariano Moreno, en Chimbas, fue el epicentro de una misión en la que 300 chicos de San Juan, San Luis, La Rioja y Bahía Blanca llevaron la palabra de Dios casa por casa. Esta misión se realizó con mucha alegría. Los jóvenes, sacerdotes y seminaristas coparon las calles de este humilde vecindario y hasta bendijeron algunas viviendas.

La "acción" es uno de los cuatros pilares con los que se trabaja en la Acción Católica Argentina. Y justamente eso fue lo que los chicos de diferentes provincias hicieron ayer en barrios, hospitales y otros espacios sanjuaninos. En la villa Mariano Moreno, los jóvenes se pusieron en acción a las 18. Los colectivos colmados llegaron hasta la humilde capilla de Andacollo, que está en uno de los laterales de la Ruta 40, a pocos metros del puente de Albardón. Y, de inmediato, empezaron a caminar las calles de la villa.

Con música y alegría. Los jóvenes recorrieron las calles cantando canciones religiosas.


Como si fueran hormigas se distribuyeron en las diferentes manzanas del vecindario y empezaron a golpear puertas. Tocaron timbres, golpearon las manos y hasta cantaron canciones religiosas mientras caminaron las calles de la villa. Con vinchas coloridas, con enormes flores y con la cara pintada de diferentes colores llevaron alegría a muchas viviendas. "El objetivo es que la gente comprenda nuestra alegría. Además estamos invitando a que vayan hasta la capilla para que más tarde festejemos todos juntos", dijo Rosario Valdés, de La Rioja.

Mientras que en algunas casas el cuarteto y la cumbia sonó a todo volumen, en otras los chicos oraron alto para dar una bendición. Los jóvenes de los diferentes grupos estuvieron acompañados por referentes de la villa, para que pudieran misionar con tranquilidad.

"Ya visitamos varias casas. En algunas no nos atendieron, pero en otras nos recibieron muy bien. Ahora estamos escuchando a una señora que nos está contando una experiencia que tuvo con Jesús, debido a un problema de salud", dijo Abi Ruiz, que llegó desde San Luis y que junto a tres chicos más, de diferentes provincias porque salieron mezclados, hasta se sentaron en la vereda para escuchar el relato de la anciana.

Desde la vereda. Algunos vecinos no les abrieron las puertas de sus casas, pero igualmente fueron atendidos.



La actividad finalizó con una obra de teatro que los jóvenes hicieron para los chicos de esta comunidad. Además, compartieron una merienda y hasta disfrutaron de una celebración religiosa, en donde los danzante de la Virgen de Andacollo brindaron su clásico espectáculo. Hubo algunos sacerdotes que hasta hicieron la unión de los enfermos en algunas viviendas de la villa. Además, algunos grupos de jóvenes organizaron actividades recreativas en las plazas de la villa para que los niños también pudieran disfrutar de una jornada diferente.