"Hasta que no se encuentren nuevas evidencias que nos permitan inferir que se trata de un sitio arqueológico, consideramos que son formaciones modernas cuyo objetivo de construcción puede ser hipotetizado de muchas formas pero que no corresponden a culturas prehistóricas y por ende no se trata de un geoglifo arqueológico", destaca el estudio que realizó el Instituto de Investigaciones Arqueológicas y Museo "Profesor Mariano Gambier", perteneciente a UNSJ, luego de investigar los geoglifos hallados en abril pasado en Ullum.

El hallazgo fue de un grupo de personas que había advertido a Gendarmería, que labró un acta para hacer intervenir a las autoridades. Un equipo de especialistas del Gambier entonces desplegó una serie de tareas, incluidas excavaciones. "No se encontró ningún resto como cerámica, instrumentos líticos u otro tipo de material que indicara ser una zona arqueológica. La existencia de cableados y postes de vieja data, como así también un sistema de tendido eléctrico de la segunda década del siglo XX evidencian un uso antrópico", aseguraron.