Construyendo la sede propia. Un grupo de los 300 chicos que entrenan en el Club Deportivo Caucete acomoda la pila de ladrillos que serán utilizados para comenzar a levantar los vestuarios. El CDC empieza a tener raíces. 


En el Club Deportivo Caucete celebran que ya se terminaron las mudanzas forzosas y repentinas porque tenían que dejar el predio que conseguían que les prestaran por un tiempo para desarrollar sus actividades. Ahora todos sus sostenidos esfuerzos contarán con la satisfacción extra que se irán acumulando en un mismo lugar, precisamente en las 4 hectáreas de un terreno ubicado en calle Colón, entre Ruta 270 y Aberastain, en Caucete.


Con 3 años de vida institucional -el 20 de junio de 2014 recibió el reconocimiento en Personería Jurídica- el ‘CDC’ pasó de ser una escuelita de fútbol a un club con presencia en las inferiores de la Liga Sanjuanina, la LIFI y la Liga Caucetera, con más de 300 chicos que entrenan. Desde el año pasado también participan en la primera de la Liga Caucetera (el jugador de mayor edad tiene 21 años) y a todo ese crecimiento le faltaba un punto de referencia. La situación se agravó a fines del año pasado, cuando tuvieron que dejar las instalaciones de la Cooperativa Caucetera y todos sus elementos, desde pelotas y conos hasta sillas y heladeras para la venta de bebidas tuvieron que repartirse ‘en la piecita del fondo’ de las casas de los integrantes de la Comisión Directiva.


“Fuimos a pedir ayuda al secretario de Deportes, Jorge Chica, y al gobernador Sergio Uñac. Hoy agradecemos que en ese momento vimos que tendríamos la respuesta que buscábamos y entonces en febrero señamos este terreno”, describió el presidente del club, Mauro Quiroga.


A la alegría de haber dado el primer paso de la casa propia le sucedía todo el trabajo que hay que hacer. Padres y dirigentes notaron que con pico y pala no iban a poder limpiar el terreno, que durante 40 años había quedado a sus suerte. “Le solicitamos colaboración al intendente Gil y con la maquinaria pudimos limpiar todo”, agradeció nuevamente Mauro.


El objetivo que tienen es construir una cancha principal y otras 4 auxiliares. Por lo pronto, comenzaron con las primeras tareas para edificar los vestuarios.


Ya quedó atrás la época en que realizaban campañas hasta en redes sociales buscando la cancha propia. Ya no son los errantes y en poco se acostumbrarán a ser presentados como el club de la calle Colón en Caucete.