Un lugar lleno de recuerdos. La foto de Estela, los dibujos que sus hijos le regalaron y la puerta de la habitación cerrada con candado forman parte de este lugar que permanece lleno de recuerdos.

Parece que todo ocurrió ayer. El lugar permanece cargado de tristeza y de duros recuerdos. Cuando nombran a Estela, los ojos se les ponen colorados y la voz les tiembla. Sumado a esa sensación de dolor, bronca y desolación, la casa parece detenida en el tiempo. Una foto enorme de la mujer que fue asesinada por su esposo y unos dibujos que los chicos le regalaron a su mamá cuando estaba viva, son las únicas imágenes que hay en el living de la pequeña casa, mientras que la habitación en la que ella murió permanece cerrada con candado. Domingo Olmos, el padrastro de Estela que siempre la cuidó y amó como si fuera su propia hija, comentó lo duro que es vivir en esa casa, soportar los recuerdos y la soledad.

La habitación en la que Estela murió sigue igual que aquel 25 de mayo. Sólo en ocasiones, Domingo ingresa para sacar un poco de tierra. Es que él, siente que el candado en la puerta no permite que los recuerdos salgan de ese cuarto, aunque admite que eso es imposible. "Están los colchones donde dormían, las cuchetas de los chicos y hasta un roperito de ella, que tiene su ropa", dijo el hombre que quedó viudo hace dos años. La mamá de Estela murió, también en esa casa, luego de luchar contra una dura enfermedad y la tristeza de haber perdido a su hija.

Según el hombre, y una vecina que todos los días le ayuda a cocinar y a lavar un poco de ropa, la habitación nunca fue pintada de nuevo. Los dibujos de los niños continúan en la pared y las manchas de sangre son parte de los recuerdos de ese lugar. "No me gusta entrar y me cuesta hasta pasar por la puerta. Yo tengo la llave del candado de esa habitación, pero casi nunca la abro. Es muy duro vivir acá y tener que ver esto todos los días, pero no me queda otra. Si dejo la casa seguro la usurpan y además, no puedo pagar un alquiler", explicó el hombre que fue uno de los primeros que entró a la casa y vio a Estela muerta en su cama, hace 5 años.

"Nosotros lo dejamos que viviera acá -por Fretes- para que los chicos no estuvieran en la calle y él la mató. Actuó con tanta frialdad y obligó a su hijo a mentir y a hacer cosas horribles. Esperamos que nunca salga de la cárcel", concluyó Domingo.


* Condenado en 2014

Cristian Fretes, el hombre que mató a su mujer embarazada a golpes y puñaladas, fue detenido inmediatamente después del asesinato y tras un año y medio el Tribunal de la Sala II de la Cámara Penal lo condenó a prisión perpetua por el delito de homicidio triplemente agravado, por ensañamiento, por el vínculo y por violencia de género. Fue el primer procesado en un caso de femicidio en San Juan.


* Un caso que conmocionó

El femicidio de Estela Bustos fue tan conmocionante que llegó a los medios nacionales. Fretes comenzó a golpear a su esposa por supuestos celos. Luego, ella intentó escapar, salió hasta la vereda y el la siguió golpeando hasta meterla a la casa otra vez. La vereda y un árbol quedaron con sangre. Ahí obligó a su hijo a limpiar la casa, bañar a su mamá muerta, acostarla en una cama y luego, a mentir.