Orgullo. Gabriel Moreira, profesor de danza a cargo del taller de bailoterapia para adultos mayores, dijo que se siente orgulloso de los resultados obtenidos con esta actividad.

Es arquitecto, personal trainer, profesor de danza, coreógrafo y hasta profesor de modelaje y protocolo. Trabaja en todos estos rubros aunque, según dijo, en ninguno alcanzó la plenitud que obtuvo con la actividad que inició hace dos años: sacar de la depresión a las mujeres mayores de 60 años a través de la música y el baile. Se trata de Gabriel Moreira, responsable del taller de bailoterapia en la Dirección de Políticas para el Adulto Mayor al que asisten más de 60 alumnas que aprovechan cada clase o evento para tomarse fotos junto al "profe". El jueves pasado, este joven fue una de las atracciones principales del Tercer Encuentro Provincial del Adulto Mayor. Hizo bailar bachata, salsa y chachachá, a los casi 10.000 abuelos que participaron del evento.

Cualquier estilo musical sirve para hacer bailoterapia, pero Gabriel eligió los ritmos latinos para generar adrenalina y entusiasmo en sus alumnas. Esto, más su carisma, conformaron el combo perfecto para que las abuelas tengan asistencia perfecta a las clases de bailoterapia. "La música latina es de alta frecuencia ya que estimula al cerebro a que segregue sustancias que provocan alegría y bienestar. Así que la utilizo para sacar adelante a mis alumnas y lograr que vuelvan a sentirse plenas y jóvenes. Y he conseguido muy buenos resultados. Cuando arranco la clase les digo que yo soy el profesor y ellas mis alumnas adolescentes. Aunque parezca mentira, ellas hacen un retroceso a su juventud para disfrutar a pleno de cada clase. Es más, tienen asistencia perfecta.

Ese entusiasmo es mi mejor recompensa", dijo el profesor.

"Mi sueño es poder seguir siendo útil para los demás y ser un ejemplo de vida para mis hijos"
GABRIEL MOREIRA

Profesor de danza

Las clases de bailoterapia se dividen en dos momentos. Los primeros 45 minutos, las alumnas hablan sobre sus problemas y sus expectativas, mientras que la próxima hora y cuarto la dedican pura y exclusivamente a bailar bachata, salsa, chachachá o cualquier otro baile latino. Ese es el momento más esperado por todas. "Durante el baile se olvidan de sus problemas, de sus dolores y de su soledad. Esa hora y cuarto de baile representa para ellas un alivio para todas sus penas. Hay incluso algunas que por sus dolencias no pueden bailar, pero igual asisten al taller. Participan de la terapia y después se quedan sentadas para ver bailar a las demás", dijo Moreira.

Como este profesor también sabe de protocolo y modelaje, capacita a las abuelas para que participan de la elección de la Reina Provincial del Adulto Mayor. Les enseña a caminar en la pasarela, a dirigirse al jurado y a saludar al público, aunque a veces trasciende estos límites. Hay candidatas que le piden que sea su acompañante en el desfile previo a la elección. "Muchas abuelas están muy solas, aunque tengan familia. Para mí es un placer acompañarlas, ya que es una forma de agradecerles todo lo que me dan. Yo soy el profesor, pero son ellas las que me enseñan a vivir", dijo Moreira.


Un costado solidario

Gabriel Moreira también dedica parte de su tiempo a ayudar a los más necesitados. Creó la Fundación Esperanza que organiza actividades deportivas, culturales y artísticas, cuya entrada es un alimento no perecedero, ropa o calzado, que luego se distribuye en comunidades que viven en zonas alejadas. "La solidaridad también es una pasión para mí. Por suerte cuento con el apoyo incondicional de mi esposa para poder realizar todas las actividades que me hacen feliz", dijo.