Un ángel. Agustín, a la derecha, en una imagen con sus padres y hermano menor, que ayer publicó su padre Diego, con la inscripción "Hasta siempre mi ángel". 

Cuando el diagnóstico indicó que era un tumor cerebral, sus padres decidieron partir al otro día a Buenos Aires para que definan la naturaleza y realizar ahí mismo el tratamiento que fuese mejor.

Mientras tanto, las redes sociales en San Juan replicaron innumerables veces la situación del pequeño, nieto del ministro de Educación, Felipe de los Ríos, y tratando de dar su apoyo, se originaron cadenas de oración.

El desenlace previsible ocurrió ayer. Agustín Tell, de 4 años, falleció en el Hospital Fleni y hoy se realizará su sepelio en San Juan.

"Hasta siempre mi ángel", escribió en una de las redes sociales su papá Diego, lo que convalidó a los portales digitales a dar la triste novedad del pequeño y nuevamente las reacciones de los lectores fueron masivas, lamentando lo ocurrido y dando una muestra de apoyo a los padres de Agustín.

Fueron dos meses impensados. A principios de enero, los profesores de la colonia de vacaciones a la que asistía Agustín detectaron cierta anomalía en la motricidad del pequeño. Aviaron a sus padres, quienes inmediatamente efectuaron los estudios solicitados.

Según conocidos de la mamá de Agustín, la hija del ministro, el niño ya había mostrado algunos cambios en su personalidad, pero fueron considerados como una cuestión propia de la edad.

Una tomografía mostró el tumor. En Buenos Aires constataron que tocaba los centros nerviosos y estaba ubicado en el tronco encefálico. Esta tumoración ocupaba el 30% de la cabeza de Agustín. No podía intervenirse quirúrgicamente.

La lucha duró hasta ayer. Agustín ya descansa y hoy se realizará su sepelio a las 15 en el cementerio Palmares, en Santa Lucía.