La construcción de la estación transformadora (ET) Sargento Cabral que pretende realizar la empresa de distribución eléctrica Energía San Juan en un terreno ubicado en Sargento Cabral, entre Cabaña y Callejón Ullum, encuentra resistencia en los vecinos, quienes pretenden que se traslade la obra a otra zona, menos poblada.

El contrapunto nació en febrero de este año, con las primeras tareas en el terreno del departamento Rivadavia. Energía San Juan expresó a través de un comunicado para DIARIO DE CUYO que el proyecto fue presentado para su aprobación ambiental en octubre del año pasado y que la Audiencia Pública prevista en la ley se realizó en febrero.

Belén Icazatti, presidenta de la Unión Vecinal del Barrio STOTAC, indicó que en aquella ocasión fueron notificados apenas con 24 horas de anticipación. Esa audiencia también originó que se conforme una asamblea para oponerse a que se instale la ET en ese predio. "Nos parece perfecto el progreso, pedimos una reubicación, porque esta es una zona urbana preexistente", sostuvo Icazatti, quien agregó que cerca de 1.100 firmas respaldan el petitorio.

La oposición de los asambleístas se sostiene en diferentes temores: a la cabeza figuran terribles riesgos de salud, como leucemia infantil. Icazatti también agregó que la valuación de las propiedades sufrirán una importante caída y continuó con el incremento de posibilidades de incendios, rayos en tormentas eléctricas, de rotura de electrodomésticos y hasta accidentes de niños.

Desde la empresa señalaron que las instalaciones a construir deben superar los estándares exigidos por las normas ambientales de nuestro país, los cuales son más exigentes que los fijados en países con vasta experiencia como Alemania, Suiza, Inglaterra y Estados Unidos, por ejemplo. Y agregó que la Universidad Nacional de San Juan realizó mediciones de campos eléctrico y magnético en instalaciones de similares características, que ya funcionan, y se verificó que los campos medidos se encuentran muy por debajo de los requeridos por la normativa aplicable (del orden del 3% del valor máximo exigido).

En la otra vereda, sostuvieron que esos valores fueron fijados en la resolución 77/98 y que sus autoras refieren al impacto ambiental, pero no consideran estudios epidemiológicos. Y muestran un estudio reciente de la Universidad de La Plata que indica valores muy inferiores. En la resolución se fija 25 Tesla como valor máximo y en el estudio, recomiendan no exponerse a más de 0,35.

Icazatti reconoció que la asamblea no encontró en San Juan especialistas que apoyen el reclamo, aunque sí afuera: nombró al fiscal federal de Tucumán Gustavo Antonio Gómez y al biólogo cordobés Raúl Montenegro.

La pulseada fue sostenida desde febrero. Para los vecinos, la empresa puede llevar la ET a otro predio pero la inversión será mayor. La empresa indicó que en ese terreno "se minimiza la necesidad construir nuevas líneas de media tensión, dada la cercanía con el Alimentador San Juan Parque Industrial".

Anteayer, como requisito para el otorgamiento de la Declaración de Impacto Ambiental, la distribuidora convocó a una reunión para informar los resultados de los últimos estudios realizados.

Pero otra vez hubo vecinos notificados con menos de 24 horas de anticipación. Y no les gustó. Se presentó una veintena, con un escribano, para expresar entre otras cosas que la reunión debía anunciarse con más tiempo y en otra época, proponiendo la segunda quincena de febrero. En el comunicado, Energía San Juan, aseguró que convocó a una segunda reunión, el jueves, para quienes no pudieron asistir.

 

La coincidencia

• La creciente demanda de energía eléctrica del área urbana motiva la necesidad de ampliar la capacidad de transformación de la que Energía San Juan dispone. La Estación Transformadora Sargento Cabral abastecerá a Rivadavia y suroeste de Chimbas, sumándose a otras 3.

Belén Icazatti, presidenta de la Unión Vecinal del Barrio STOTAC, sostuvo que ante la situación de la construcción de la Estación Transformadora en una zona residencial se encontró que el problema para ese sector de la comunidad se puede repetir en cualquier otro de similares características porque "en Argentina no existe legislación que regule los campos electromagnéticos".

Icazatti agregó que a raíz que los integrantes de la asamblea fueron interiorizándose en el tema y contactando a otros afectados, como la red nacional de barrios irradiados, es que elaboran un anteproyecto de ley provincial para esta regulación.

"Hay una laguna y elaboramos un proyecto, porque la normativa, basada en una resolución de 1998, no es de salud sino ambiental".

Finalmente, señaló que ya hablaron de su caso en la Municipalidad de Rivadavia y tienen previsto hacerlo también con el Gobierno provincial.