Disfrute. Los alumnos del Primer Ciclo de la Escuela Albergue Casa del Niño, de Valle Fértil, se divirtieron personificando a los pueblos originarios para conmemorar el Día de la Diversidad Cultural.

En la Escuela Albergue Casa del Niño, en Valle Fértil, se propusieron conmemorar el Día de la Diversidad Cultural con vivencias y rindiéndole homenaje a los ancestros. Y fueron los alumnos de 1ro, 2do y 3er grado los encargados de llevar a cabo esta iniciativa. Vestidos con los trajes típicos de los pueblos originarios y al ritmo de música indígena recorrieron las calles del pueblo para mostrar respeto por sus antepasados. La jornada terminó en la biblioteca donde una vecina descendiente de huarpes les habló sobre las costumbres ancestrales.

La iniciativa fue tan atractiva que toda la comunidad educativa quiso participar. Y los padres de los chicos fueron los principales colaboradores. "Fueron los papás quienes se encargaron de buscar los modelos de los trajes de los pueblos originarios que habitaron San Juan para hacerle una réplica a los chicos utilizando diferentes materiales, la mayoría reciclados para abaratar costos. Los docentes trabajamos en conjunto con los miembros de la Biblioteca Domingo Faustino Sarmiento con quienes llevamos adelante este Encuentro de Culturas", dijo Rosa Pizarro, docente de la Escuela Albergue.

Caracterizados y al ritmo de los acordes de una canción aborigen, los alumnos avanzaron por las calles del pueblo ante la mirada sorprendida de los vecinos que se acercaron atraídos por la belleza de los trajes y la originalidad de la música.

Recreo. Luego de participar de las actividades organizadas en la Biblioteca Sarmiento, los chicos tomaron un descanso para compartir la merienda.
Relato. Mercedes Calívar habló sobre las costumbres ancestrales.

Los chicos llegaron a la Biblioteca y también se encontraron con una sorpresa. Los esperaba Mercedes Calívar, descendiente de huarpes. Vestida con un atuendo de época, la mujer relató cuáles eran las costumbres de su familia, cómo era el estilo de vida y qué se comía por aquel entonces. "Todos disfrutamos de los relatos de Mecha, como le decimos a nuestra vecina. Los chicos escucharon atentamente su relato y de esta manera aprendieron de manera divertida que hay que respetar a todos sin importar la cultura a la que pertenece y a que hay que valorar nuestra historia y antepasado", dijo la docente.

La jornada educativa de los chicos terminó con un recorrido por la Biblioteca donde se armó una sala de museo para exponer diferentes utensilios que usaron los pueblos originarios.