Panes dulces caseros y artesanales. La estrella de Cáritas de la Escuela de la Sagrada Familia fueron los panes dulces, que costaban 350 pesos cada uno. Muchas personas se acercaron a preguntar y varios compraron el producto.

Debido a la pandemia, Cáritas amplió su oferta para poder llegar con la ayuda a más gente. Aumentó la cantidad de talleres gratuitos de capacitación para contener especialmente a las personas que se quedaron sin trabajo a raíz del covid. Las nuevas propuestas fueron maquillaje, computación y reciclado, en las que participaron unas 70 personas. Ayer, y tras un año suspendida, se volvió a realizar la feria anual de la institución con la participación de Cáritas parroquiales de los diferentes departamentos.

En esa feria se reflejó cómo Cáritas agregó el dictado de tres talleres de capacitación nuevos, destinados a las personas más afectadas por la crisis que generó la pandemia. Y con buenos resultados. En el taller de maquillaje participaron 30 personas al igual que en el de computación. En tanto que fueron 10 las que hicieron el taller de reciclado. Estos 70 participantes se sumaron a los más de 150 que se capacitan también gratis en panificación, jardinería, costura y en huertas familiares, las propuestas tradicionales que ofrece esta institución. "El objetivo de Cáritas fue poder asistir de alguna manera a quienes se quedaron sin trabajo en esta época tan difícil que nos tocó vivir. Para esto contamos con la colaboración del Sindicato Empleados de Comercio, que colaboró con los profesores para el dictado de clases. Y la propuesta fue muy bien recibida por este sector de la población", dijo Mario Noroña, presidente de Cáritas San Juan.

Como la crisis económica continúa, Noroña dijo que ya se está pensando agregar nuevos talleres para que más gente tenga la posibilidad de generar un emprendimiento laboral. Sostuvo que el año que viene continuarán con los tres talleres mencionados, más los tradicionales, y pondrán en marcha uno de peluquería y otro de barbería.

"Es muy importante darle a la gente herramientas para que pueda salir adelante por sus propios medios. Esa es la idea de Cáritas y trabajamos para lograrlo", dijo Noroña.

Ayer, y tras un año de suspensión por la pandemia, se realizó la Feria Anual de esta institución, donde las Cáritas Parroquiales de los departamentos expusieron sus trabajos para la venta. Fue en el cruce de las peatonales, donde la gente se agolpó alrededor de los puestos para comprar. Lo más vendido fueron los productos relativos a la Navidad como los panes dulces caseros y las coronas artesanales de adviento. "Con esta feria la gente conoce lo que hacemos, compra nuestro trabajo y nos pide un contacto para comprar en otra ocasión", dijo Claudia Figueroa, de Cáritas de la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús.

  • Un taller debutante

Este año, Cáritas de la Parroquia Santa Teresita del Niño Jesús puso en marcha el taller de reciclado, en el que elaboraron distintos adornos.

  • Jardinería autóctona

Cáritas de la Parroquia Divino Salvador vendió los cactus que la gente aprendió a cultivar durante las clases del taller de jardinería.