A diario nos enteramos de la existencia de nuevas tecnologías y, casi al mismo tiempo, del desarrollo de nuevos productos y dispositivos que aprovechan esas tecnologías. Uno de los actores más importantes en esta evolución ha sido Microsoft, y no sólo por su longevidad en el mercado. En estos últimos años, sobre todo, los laboratorios de la empresa de Redmond han concretado desarrollos sorprendentes.
Cabe mencionar que, principalmente, los esfuerzos han estado enfocados en mejorar la interacción de los humanos con las computadoras. De allí han surgido avances tales como el reconocimiento de gestos, la detección de la mirada y el sistema OmniTouch, que convierte todas las superficies circundantes en táctiles.
Reuniendo varios de esos desarrollos individuales, una de las patentes presentadas recientemente por Microsoft corresponde a unas gafas inteligentes (conocidas como smart glasses). Si bien son similares en forma y función a las desarrolladas por Google, su aplicación sería levemente diferente. Las gafas inteligentes de Microsoft están pensadas para ser usadas en situaciones y eventos concretos, a diferencia de las de Google, que serían para utilizar todo el tiempo. A raíz de los ejemplos y diagramas presentados durante su patentamiento, surgen posibles aplicaciones para estas "smart glasses". Por ejemplo, podrían mostrar información y estadísticas sobre los jugadores mientras se observa un partido en un estadio. Pueden mostrar los subtítulos en la ubicación y el idioma deseado para una película o un recital.
Las gafas también cuentan con un micrófono y una cámara de video. Las funciones del control del sistema son variadas: por voz, mediante la mirada, ya que el sistema detecta el centro de atención de la misma, gestos detectados por las manos, o un panel ubicado en el muñeca, similar a un reloj de pulsera.