Prácticamente no hay rubros que no estén incluidos en la actividad minera, mucho menos si se trata de motores eléctricos. Esa demanda fue tomada apenas se inició la construcción de la mina Veladero por Juan Hipólito Janavel, quien venía haciendo este trabajo a baja escala en su taller de la calle Patricias Sanjuaninas. Su fuerte era la industria vitivinícola, el sector agrícola con los pozos y también la minería no metalífera a baja escala, pero la llegada de Veladero cambió todo. Desde el taller que cuenta con 850 metros cuadrados (incluidas oficinas y otros sectores), proyectado a 2.300 metros cuadrados el año próximo en un terreno lindante adquirido para poder cumplir con las necesidades mineras, ahora también incluida Lama.

Claro que en este rubro en particular las cosas pasan básicamente por la adaptación a los nuevos requerimientos. "Estabamos acostumbrados a motores de potencias más baja y de pronto tuvimos que trabajar con grandes potencias. Eso demandó la especialización del personal, certificar normas de calidad y seguridad para que nos aceptaran y trajeran acá sus trabajos porque la competencia es grande. Ha venido gente de otras provincias a hacerlo y eso exige más esfuerzo todavía", cuenta Janavel.

Su labor está vinculada a una historia familiar ya que su papá también se dedicó a la reparación de motores. El particularmente, abrió su propio negocio en 1996 no sólo con reparación y mantenimiento sino también con ferretería industrial, además de ser distribuidor de Weg, marca brasileña ubicada entre las diez mejores del mundo en este rubro. De hecho esta compañía fabricó el 90 por ciento de los motores para Veladero. "Así empece con pre entregas, certificaciones y mantenimiento de los motores. Ahora acabamos de venir de una capacitación de asistencia técnica vinculada al cambio en el bobinado de motores de hasta 40 HP que se harán con aluminio y no con cobre. De no haber sido por la minería del oro no hubiéramos logrado todo esto, por eso ahora también empezamos a trabajar con Lama y nos proyectamos para aumentar nuestra capacidad", explica Juan.

Actualmente Janavel, está dedicado a la venta de motores eléctricos, compresores, bombas de agua, soldadoras eléctricas, cortadoras de césped, y especializados en bobinados y reparación de motores eléctricos y ventiladores industriales. Un rubro de alta demanda que también fue tomado por manos sanjuaninas