La inflación anual acumulada del orden del 40% en los últimos 12 meses para muchos insumos, bienes y servicios impulsa la recesión en la toma de decisiones de los productores, dejando rienda a suelta a la aplicación mínima e indispensables de fertilizantes, herbicidas y pesticidas.
"La inflación, la presión impositiva, la inseguridad y la falta de seguridad jurídica generan un clima de negocios que desalienta cualquier inversión productiva", señalan algunos productores.
También las restricciones a las importaciones. Por ejemplo, en los caminos rurales en las reuniones de los productores afloran comentarios en torno a la suba sobre todo de fertilizantes de origen sintéticos e importados, como los fosforados, muy demandados al inicio de los ciclos vegetativos de vides y hortalizas entre otros cultivos. Esta semana la bolsa de 50 kilogramos cotizó en el mercado alrededor de los $450.
También preocupa la escasez de insumos importados como los herbicidas, maquinarias y repuestos ya no para hacer crecer la frontera productiva, sino para frenar su achicamiento al menos.
Tractores y maquinarias
Para el doctor Alberto Cassab de Dismotor no hay una entrega fluida de tractores en el país, a pesar de que la línea Massey Ferguson de ya se fabrica en el país. Respecto de la demanda el empresario comentó que el año pasado había mayor cantidad de pedidos pero por las restricciones no habían tractores.
Hoy es la inversa, hay más disponibilidad de unidades, pero por la incertidumbre del contexto económico, las malas cosechas y los bajos precios de la uva y el vino no hay nuevas inversiones, a pesar de todas la facilidades financieras generadas.
La gente no se anima a invertir y generar nuevos proyectos en un contexto macroeconómico confuso como este remarcó el empresario. Hoy lo único que mueve el mercado un poco es el sector hortícola, algo el vitícola en el caso de los grandes establecimientos y nada sucede en el olivícola relató.
Desde el mostrador
Por su parte Alberto Kenny, gerente de la empresa Nutrientes, desde Pocito marcó una mirada diferente. Las ventas están tranquilas y en los dos últimos meses fueron positivos y se recuperaron mucho. Hemos tratado cada caso de manera particular para financiar las ventas.
Si se nota según Kenny, mayor cantidad de problemas en la cadena de pagos, sobre todo en el cobro de cheques que vienen de afuera de la provincia, pero tampoco para alarmarse.
Sostuvo que el sector hortícola es el más dinámico en la demanda. La cebolla ha comenzado con muy buenos precios -$2 el kilogramo esta semana-; y esto da oxígeno al productor. También el tomate es un motor importantísimo en la demanda de agroinsumos aseguró.
Riego por goteo
Para la empresaria Mariela Merino, propietaria de la empresa Riego Drip, el mercado está pesado. Si bien hay muchas alternativas de financiamiento tanto de entidades como Calidad San Juan, Ministerio de la Producción, CFI y los mismos bancos con tasas subsidiadas, la incertidumbre económica se nota en la falta de inversiones nuevas.
Solo la sequía ha movilizado obras importantes en empresas de gran porte que construyen acueductos para regar sus cultivos, destacó finalmente la empresaria.

