En la zona más alta de Bella Vista, casi llegando a Maipirinqui, en Iglesia, existe un nuevo complejo de agroecoturismo. Alto Verde, Finca Orgánica, reza el cartel de la entrada, rodeado de un paisaje bellísimo. Es un espacio familiar y natural, situado en los oasis cordilleranos, con una vista excepcional, con servicio de comidas y alojamiento durante todo el año.

Hay en el lugar una huerta orgánica, manejada por los propios dueños, y además se pueden pescar truchas frescas, degustar queso de cabra, cerveza artesanal, pan casero integral, huevos, dulces y comidas elaboradas en el momento.

Además del comedor, hay una sala de ventas de artesanías y allí una vez al mes se reúnen para una feria de las artesanías donde exponen las distintas elaboraciones de los experimentados artistas de la zona, generalmente cuando es un fin de semana largo.

Hablamos con Gastón Coll, su propietario, mientras recorríamos las instalaciones. El joven emprendedor dijo a Suplemento Verde: "Con mi señora María Eugenia Baños siempre quisimos armar un proyecto de este tipo en el campo sanjuanino. Hace 13 años que estamos casados, y hace 2 decidimos venirnos a Iglesia, que es un paraíso por donde se lo mire. Estamos yendo y viniendo a la ciudad, para construir, pintar, armar, sembrar, cosechar y todo lo que demanda poner en marcha este tipo de aventuras, que nos apasiona. Tenemos dos chicos, un varón de 12 años, Tomás y una nena de 9, Luz. Ellos colaboran con los pollos, los huevos y la limpieza de malezas del pequeño invernadero".

En la propia definición de su autor "esto es una granja autosustentable, tenemos animales, verduras, frutas, todo orgánico y natural. Elaboramos distintas conservas, sin aditivos y otros alimentos son de colegas de San Juan que trabajan en la misma sintonía como mermeladas, jaleas, cerveza artesanal, vino y espumante orgánico, quesos, etc".

Su esposa nos comentó: "Tenemos por el momento alojamiento para 10 personas, en varias habitaciones y dos baños; además, un salón de artesanías y un comedor. Hay parrillero y sombrillas para estar al aire libre. En la represa hay mojarritas y canoas para actividades deportivas. Pronto traeremos pejerreyes. Las truchas se pueden ver (y pescar) en las acequias que circundan el predio y en un invernadero tenemos tomates, pimientos, cucurbitáceas, hortalizas de hoja y hasta plantas de frutillas".

Los Coll cuentan que en ese predio no se vende gaseosas, sólo agua mineral y todos los demás alimentos orgánicos. Se puede conseguir exquisitos dulces y miel de la zona. Entre los platos que se elaboran están los de diversos preparados con pollos caseros, peceto, jamón y matambre, truchas y huevos, todos con verduras grilladas y horneadas, pan integral y hasta se pueden pedir con jugos naturales…

El sitio, inigualable, la propuesta… tentadora. Por qué no pasar un fin de semana de descanso en un lugar bendecido por la Madre Naturaleza, degustando sabrosas comidas sanas y orgánicas!