Desde la aparición de la depilación con láser se han diseñado tres tipos de sistemas: el primero se basó en actuar sobre pieles claras y vellos oscuros; el segundo lo hace sobre pieles claras y pelos poco pigmentados. Actualmente una de las novedades es el láser de diodo.

El láser de diodo, como todos los láseres produce un haz de luz, que se emite sobre la piel durante una fracción de segundo, pasando así a través de ella hasta llegar al folículo piloso, donde el vello es eliminado por calor.

La diferencia entre los tres métodos es la longitud de onda con la que trabajan; el diodo lo hace con una potencia baja, lo que permite que la depilación sea menos dolorosa y también más adaptable a las pieles más bronceadas en cualquier época del año. Además como su pulso es progresivo y no continuado, el riesgo de quemaduras es mucho menor.

Las áreas sobre las que puede actuar son todas incluyendo labio superior, mejillas, barbilla, cuello, pecho, abdomen, brazos, hombros, área de bikini, piernas y espalda.

Se requiere un promedio entre 4 a 6 sesiones, con un intervalo mínimo entre una y otra de un mes o más para lograr los resultados deseados.

La depilación con láser de diodo es indolora, pero según la sensibilidad del paciente el médico podrá usar una crema anestésica tópica.

Es importante saber que está contraindicado en mujeres embarazadas. Así mismo hay que informar previamente sobre los problemas de salud existentes, los medicamentos que se están ingiriendo y la existencia de alergias, los profesionales determinarán si la depilación es compatible con el caso en particular.

Los costos varían según la zona a tratar, al igual que los tiempos de cada sesión.

Fuente: Silvina Martín de Clínica Mira, médico encargado del tratamiento Dr. Ariel Mira y staff – San Luis 463 oeste – Teléfonos: 4211610 y 4200835.