La impresionante mortandad se registró en tres feedlot de la zona, dos de Cafferata y uno en Chañar Ladeado, Santa Fe, en los cuales se combinó un producto de la dieta (que podría llegar a tener algo tóxico), potenciado con el efecto del sol y de la humedad, produjo alta mortandad de bovinos en los diferentes establecimientos. Hoy la muerte en sí, es producto de estrés térmico, producido por el calor y la humedad, pero la diferenciación con el resto de los campos es que los tres afectados justamente utilizan el mismo producto para darles de comer. El predisponente podría haber sido algo en el alimento, pero el determinante es el calor. Los signos de muerte de los animales, son estrés térmico; eso es lo que la necropsia estaría arrojando. Según relató un afectado al medio Noticias Chañar: "Vinieron veterinarios, de la Facultad de Casilda, expertos en patologías, y el factor común que hay en los feedlot que hubo muertes, es una materia prima que utilizamos como fibra y posiblemente esté infectada con una toxina u hongo y desencadenó que el animal no pueda disipar el calor. Se venía usando sin problema, y estos días que empezaron los primeros calores de verano, el animal tenía afectado su organismo y no podía eliminar el calor corporal e iban muriendo, como una ola de calor pero agravada porque el cuerpo no podía eliminar la temperatura, entonces moría infartado por exceso de calor.


Si esto ocurría en invierno, no habría muertes seguramente".


Aclaración: Ninguno de los animales se han utilizado para faena. Senasa comunicó que no es una enfermedad infectocontagiosa, hay un problema adentro del animal, que se murió por el calor porque no tenía el mecanismo para disipar tan alta temperatura. No hay virus.