¡No lo puedo creer!, así comienza Clotilde Baudonnet, cantante y elegida como voz solista por una encuesta que realizó Revista Oh! en la web de DIARIO DE CUYO, con motivo de celebrarse el próximo 16 de abril el Día Mundial de la Voz. (Ver resultado en recuadro).
"Me enteré por un hijo, me avisó que yo estaba en una encuesta de DIARIO DE CUYO. Ese día me llamaron para darme la noticia y me encrespé entera. Fue muy agradable para mí, semejante reconocimiento de todos los sanjuninos. Además es un día que voy a recordar mucho porque recibí dos buenas noticias. El llamado de ser elegida como voz solista y la otra es que volveré a ser abuela. Espero el nieto/a, número 16\\\’, ¡Imaginate cómo me siento!, expresa con alegría Clotilde.
Muy emocionada Clotilde comienza su relato recordando cómo es su historia con el canto. Mi padre José, era tenor, mi tía Margarita soprano y mi tío Enrique tenor, eran tres hermanos cantantes líricos que vivían en Buenos Aires. Creo que es suficiente para decir que es de familia; eso por el lado de los Baudonnet y por el lado de mi madre hay también guitarristas y cantantes. Empecé a cantar a los 7 años y el próximo agosto cumplo 66 años.
En mi luna de miel en Buenos Aires, tuve una gran oportunidad, que hoy la pienso y digo: ¡Cuántos cantantes hubieran deseado tener esa oportunidad que se me brindó! La propuesta era auditar para el Colón. En aquel entonces tenía 19 años, pero casada y con hijos no quise, a parte a mi marido no le gustaba que yo cante, ni siquiera en reuniones familiares.
Pero mi convicción por el canto era muy fuerte desde chiquita y mi sueño era ser cantante de ópera.
Mientras transcurría la crianza de mis hijos yo tenía una colección de óperas que escuchaba e imitaba. Recuerdan mis hijos que siempre los despertaba con la ópera y así los crié en medio de la música de todo género. Escuchaba a Plácido Domingo, Pavarotti, Kiri T Kanawa y con ellos aprendía, repetía e imitaba. Como no podía cumplir mi sueño de ser cantante de ópera yo pensaba: "Dios me tendrá como cantante para otra vida\\\’, pero a la vez me preguntaba, ¿hubiera tenido seis hijos? De ese modo ponía en la balanza mis sueños en aquellos años.
Paso el tiempo, me divorcie y ahí me entregue a Dios y a la Virgen (soy muy creyente), tenía seis pequeños que criar que, gracias a la ayuda de mis padres y hermana pude salir adelante, estaba muy desorientada. Hoy desgraciadamente ya no tengo a ninguno.
Mi primera salida a cantar fue en la Iglesia "Medalla Milagrosa\\\’, del barrio Bancario. Fue un momento de mi vida maravilloso, porque hacía lo que me gustaba cantar y más aún en la iglesia porque me elevo en todo sentido. Llené mi espíritu con la música sacra. En esos comienzos me acompañaban Betina Albornoz y luego Soledad Gregoire. Por eso hoy mi trabajo sigue siendo los casamientos, celebraciones, bautismos, etc. (ver el dato).
Luego paso el tiempo y un día me invitan a Mendoza a la Virgen de Lourdes, allí canté el "Ave María\\\’. Entonces se arrima una señora que me escuchaba atentamente, llamada Berta Aguiar, y me preguntó si pertenecía algún coro y si era de San Juan. Gracias a ella entré a la escuela de música. El maestro José Domingo Petraquini , fue mi primer maestro. Él tomó mi prueba y comencé a formar parte del Coro Universitario, donde estuve 10 años. Luego pasé al coro de María Elina Mayorga de Blech, admiro sus obras y la forma de dirigir. Estuve con ella otros 10 años más.
Pero hay cosas en mi vida que no las entiendo ¿por qué suceden? y digo: +mi vida está dirigida desde arriba (Dios). Un día llega mi hijo y me comenta que vienen a San Juan los del programa "Soñando por cantar\\\’, sin saber nada acerca de ese programa, comienzo averiguar y voy. Cuando llego, me dicen Señora ya pasó la audición. Me resultó extraño, pero pegue la vuelta y me arrime a unas personas. No señora lo han suspendido, me comentan. Teniendo un buen pálpito le pido a mi compañera Liliana Iriarte, actual compañera de canto, que me acompañe. Ella me pregunto: ¿Vos estás segura de hacer esto? Yo le respondí, creo que es mi hora. Parece que Dios no quiere que me vaya de este mundo diciendo ¿por qué no lo pude hacer? Llega el día acordado para la prueba, me presenté a las 6 de la mañana y pude dar mi repertorio al medio día. Había gente de todas las edades y lugares del país. Los representantes de Ideas del Sur me pidieron la pista y escucharon mi repertorio, que por supuesto era un área de ópera, "O mio bbabino caro\\\’, de la obra completa de "Gianni Fhicchi\\\’. Ellos quedaron en avisarme. Pasaron cuatro días y mientras lavaba mi auto, me llamaron y pensé que era una cargada, pero quedé seleccionada y me citaron al parque. A todo esto mis hijos no sabían lo que había hecho, porque tenía miedo por mi edad. Pero sin quererlo me di cuenta cómo mi accionar involucró a toda mi familia, de pronto todos eran súper conocidos. Mis hijos y sus respectivas familias. Todos me apoyaron, acompañaron y alentaron desde que empecé a cantar. De las 50.000 personas que se presentaron en ese programa yo quedé número 14. Un jurado de lujo muy profesional y la gente de Ideas del Sur también es maravillosa, todos los del canal 13. Lo más lindo de esa experiencia es que fui un referente para mucha gente de mi misma edad, para otros mayores y también para los menores. La gente que me seguía se expresaba así: yo te seguí, siempre te escuchaba, gracias a vos me animé, el barrio donde vivo se conmovió, mucha gente que no le gustaba la música empezó a disfrutar. ¡Solo le doy gracias a Dios de las oportunidades!
También encontré con mi participación en el "Soñando\\\’, mucha familia que no tenía contacto; así encontré parientes en Francia, Córdoba y Buenos Aires. Otra cosa que me trajo, es la gente que me contactó por internet, fue una lluvia de todos los países, hice muchas amistades y comparto este amor por el canto.
En estos momentos mi compañera de trabajo es Liliana Iriarte, que también pertenece al coro universitario, juntas continuamos estudiando, trabajando y cantando. Canto todos los géneros, folklore, tango, música de películas y otras más. Viviana Martino, otra gran amiga, es profesora de inglés y ella me enseña para que yo cante en inglés. Antonieta Chapini, otra amiga del canto, todas llegaron a mi vida en un momento justo.
Puedo decir que hubo un antes y un después en mi vida y mis sueños se hicieron realidad y superaron mis expectativas, yo creía que se necesitaba ser joven para cantar ópera. Por ello les digo a todo aquel que canta: "Tener fe, luchar y saber que las oportunidades pueden ser en cualquier momento de la vida. El canto sana, no puedo quejarme, canto, tengo 6 hijos y 16 nietos; ¡qué más puedo pedir\\\’!.
Para los que practican este arte les dejo un consejo: "Hay que prepararse y estudiar, no dejar de practicar, solo así se conserva la voz. La voz se cuida, envejece el cuerpo no la voz, así termina Clotilde su diálogo.

