Más de 80 productores frutihortícolas del departamento norteño, con unas 193 hectáreas totales, fueron quienes sufrieron seriamente con las heladas de primavera.

Una de ellas en noviembre y la más dañina, registrada el lunes 13 de diciembre, perjudicaron con gravedad extrema a unas estimadas 160 hectáreas de membrillo, una de las frutas más características de este departamento, y que vienen a buscar todas las temporadas desde otras provincias. Fundamentalmente a Villa Mercedes y San Isidro afectó este fenómeno climático adverso.

También se afectaron más de 20 hectáreas hortícolas, principalmente de tomates, berengenas, pimientos, zapallos y porotos, como también maíces y arvejas en lugares como Pampa Vieja, San Isidro, La Represa, Árbol Verde y Tamberías.

En Iglesia, lo más dañado por estos accidentes del clima fueron los porotos, de algunas variedades, que estaban en pleno crecimiento en el momento de la helada, y que quedaron chamuscados y sin posibilidades de recuperación.