Original e insólita idea tuvo Jaime Gringo De Lara: celebrar un día para la devolución del libro prestado. Habida cuenta que es un mal inveterado de muchos, no solamente nuestro sino universal. Libros que se prestan por cariño y no volvemos a verlos. De la idea se hizo eco el municipio capitalino y dictó el Decreto 1093 que establece el interés municipal al celebrar el Día de la Devolución del Libro Prestado, todos los 16 de julio en adelante. A la propuesta se adhirieron bibliotecarios, docentes y escritores. La instauración tiene además como objetivo revalorizar el libro. El acto conmemorativo se realizó en la sala de lectura de Biblioteca Franklin y allí se contaron anécdotas y se devolvieron libros en un marco de brindis con empanadas y vino sanjuanino.
Día del Libro devuelto

