Cherry es cereza en inglés, y ese es el tamaño de los tomatitos, de ahí el nombre. Un mini tomate, una novedad. Alta cocina, de la mano.

Diversificar. Cambiar. Rotar. Variar. Eso es lo que buscan los agricultores, ente esta oleada de altos costos, falta de insumos básicos y de personal para trabajar en el campo.

La hora de la visita no fue la mejor, a media mañana, pero el emprendimiento productivo de carácter hortícola bien vale la pena. Es que la cosecha de tomates cherrys que tiene Gualberto como mediero en la calle Mendoza cerca del Aeródromo de Pocito, arranca a las 6 de la mañana y continúa hasta las 10,30 o un poco más si hay que cargar, y a esa hora llegamos a la finca. Estos tomates pequeños los comercializan totalmente a la provincia de Mendoza y desde hace 3 años los producen para diversificar las producciones de todo tipo de chacras que hacen desde siempre.

El trabajador contó a este medio que es la primera vez que lo hacen protegido, ya que antes cultivaban al descubierto y hay riesgo supremo por el clima. En los últimos años, se ha perdido mucho tomate por el granizo y las tormentas de primavera-verano. Nos contó que aprovecharon -con el dueño de la finca- una estructura de un ex vivero de olivos y lo reorganizaron: se le puso mulching plástico y también riego por goteo, en la línea de transplante. Con todos esos condimentos se dan estos hermosos racimos de frutos, expresó orgulloso.

El transplante se hizo a fines de julio y comenzó a cosecharse en noviembre pasado.

Las medidas aproximadas del lote son 120 metros de largo por 50 de ancho; las líneas de tomates están a 0,75 metros de separación. Los plantines se hicieron en una empresa del mismo departamento a pedido y se cuidaron con esmero.

Gualberto aclaró que todos los días viene el camión a llevar cajones con cherrys, desde Mendoza. Aprovechan y también cargan tomates redondos tipo platense, que se hacen en la misma finca.

Con respecto a la plasticultura, agregó, que hoy en día, el agro exige cobertura de protección, sumado a riego por goteo y si es posible mulching, para buscar elevar los rendimientos, ya que es la única manera de poder compensar los altos costos internos que reinan en Argentina.

Mencionó también que esperan cosechar todo enero y hasta unos días de febrero, y que son de altos rindes por hectárea estos tomates, a pesar de su tamaño final pequeño característico.

Ferias de Mendoza, supermercados y restaurantes son los compradores de estos cherrys.