Marina Maekawa, Daniel Gustavo Méndez, Alicia Otero, Bruno Menarvino y Javier Spagnolo, técnicos de la Estación Experimental Agropecuaria General Villegas del INTA, informan que un factor clave es la cantidad de semillas viables a implantar. En el caso de alfalfa, hay una gran variabilidad en tamaño y calidad, por eso es importante analizar las semillas antes de la siembra, haciendo las determinaciones de Poder Germinativo (PG) y Peso de mil semillas (P1000).
El análisis de germinación es el principal criterio para evaluar la viabilidad de las semillas. Un correcto análisis de germinación de alfalfa debería incluir la siguiente información expresada en porcentajes: a) Plántulas normales: las que desarrollan un brote normal y sano y una raíz (primaria y secundaria). b) Plántulas anormales: son todas aquellas que no pueden ser clasificadas como normales. A menudo carecen el brote y/o de la raíz. c) Semillas muertas: son aquellas que absorben agua, se pudren y no producen una plántula durante el tiempo que dura el análisis de germinación. d) Semillas duras: son semillas que no se hinchan y no comienzan el proceso germinativo, ya que no absorben agua.
El Poder germinativo (PG): da una idea de la potencialidad de la semilla para desarrollar plántulas normales y producir una implantación rápida y pareja de los cultivos en condiciones óptimas. Para conocerlo se requieren dos recuentos de plántulas normales: 1) A los 5 días se realiza el primero. El valor aquí se denomina Energía Germinativa, y es indicativo del vigor de las semillas. 2) A los 10 días se determinan todas las categorías antes mencionadas, y el recuento de plántulas normales aquí corresponde al dato de Poder Germinativo.
También es importante el Peso de 1000 semillas (P1000): Este parámetro se usa para ajustar la densidad de siembra, y es sumamente variable. Se expresa en gramos. Se debe relacionar con el PG para saber cuántas semillas viables hay en 1 kg.
¿Qué dice la investigación? De 100 muestras de semillas de alfalfa analizadas durante los años 2010, 2011 y 2012, por ejemplo con un PG de 83% se necesitan 13 kg/ha para lograr 200 pl/m2, mientras que con un PG de 50% hay que aumentar la densidad a más de 21 kg/ha. Y si el PG fuese de 98% se logrará el mismo objetivo (200 plantas/m2) con menos de 11 kg/ha. ¿Y cómo influye el peso de la semilla? Para una semilla que tiene un P1000 de 3,21, se deben sembrar 13 kg/ha para lograr una densidad de 200 plantas/m2. Y así se puede ver la densidad de siembra.