Para conocer la situación del membrillo en Jáchal, esta semana hablamos con Cristian Romero, secretario de la Producción de la Municipalidad, quien dijo a Suplemento Verde que se puede estimar en aproximadamente unos 4 o 5 millones de kilos de esta fruta perdida, por las heladas de setiembre. Destacó que en la zona de La Represa y Entre Ríos se puede hablar de valores entre 90 y 100% de daño. Villa Mercedes, La Gran China y San Isidro, variable, entre 50 y 60%; en Huaco también está cercana al 50% la pérdida de producción. Y ya más al sur es menor el porcentaje. Realmente golpeó muy severamente al departamento esta incidencia climática. Y si hablamos de un número frío, podemos decir que no habrá fruta esta próxima temporada, puede ser que haya un 50% de lo normal. Al consultarle sobre los rumores que circulan de un proyecto de instalación de una planta procesadora de pulpa en el departamento norteño, Romero dijo que está el compromiso asumido por el Ministerio de Agricultura de la Nación con un fuerte aporte y se sumó el Gobierno provincial también para dar esta salida a unas 500 hectáreas que se dedican a esta actividad.

Néstor Navarro Gervasoni, de la Dirección de Sanidad Vegetal provincial, y Silvio Cabanay, técnico de la repartición en Jáchal comentaron a este medio que las heladas dejaron muy poco membrillo lamentablemente, y en esta entidad ahora están repartiendo productos químicos para el bicho del cesto, y ya entregaron a los productores jachalleros la cipermetrina para cumplir con el calendario de alarma de primer vuelo de Carpocapsa pomonella, gusano de la pera y la manzana, la principal plaga y el enemigo número uno del membrillo en general. También hicieron tareas de poda con cuadrillas en el invierno. Los dos dieron valores aproximados a los estimados por Cristian Romero en cuanto a los daños en porcentajes según las zonas, destacando que en las zonas del norte, mas tempranas, lo tomó más tierno al cultivo, estaba en la etapa más sensible en el inicio del cuaje, cuando la flor está más delicada. Grandes productores como la familia Pozo, o los Gutiérrez, no sufrieron tanto, un 50% aproximadamente y en el centro de la villa cabecera, sur de la región productora, más tardía en fechas, hay montes frutales de mucha extensión que apenas perdieron el 5 ó 10% de su producción.