En noviembre pasado, el Gobierno provincial y la Cámara de Empresas Perforistas pusieron en marcha un Centro de Capacitación Laboral en Perforaciones que ya dio los primeros frutos. Hace un par de días egresaron los primeros Perforistas Mineros de la provincia, con muchas expectativas laborales. Algunos ya consiguieron trabajo, mientras otros esperan ansiosos que los contraten.


Pedro Farías es uno de los afortunados. Tras conocer del curso a través de los medios de comunicación, decidió inscribirse, aunque con poco optimismo. "Eran 1.500 los inscriptos así que nunca imaginé poder ingresar a hacer el curso, pero no sólo pude entrar, sino que además conseguí trabajo. Estoy trabajando como ayudante de perforista minero', sostuvo este joven sanjuanino de 26 años.


Este primer curso de perforista orientado a la minería generó mucha expectativa en la provincia porque se trata de una actividad con un buen nivel de ingresos, a partir de un básico que ronda los $200.000, y porque implica mano de obra muy demandada en todo el país.


Los perforistas conforman el personal encargado de manejar los equipos de perforación, una tarea muy específica y que demanda gente altamente capacitada porque las máquinas tienen un costo de varios miles de dólares. Además, es clave en la etapa de exploración de los prospectos mineros. El viernes pasado, en el marco de la Expo San Juan Factor de Desarrollo de la Minería, se entregó los diplomas a los nuevos egresados.

>> LAURA LÓPEZ (45)
  • En busca de un mejor futuro

Laura López tiene 45 años, 5 hijos y muchas ganas de tener un trabajo estable y con un sueldo que cubra las necesidades básicas en su familia. Esto fue lo que la motivó a ingresar al curso de Perforista Minero. Ya egresó y ahora tiene todas las expectativas puestas en poder vivir de este oficio. "Soy preceptora, he trabajado en una empresa de transporte y he cuidado niños y abuelos. Ahora hago la limpieza en 4 casas. No me asusta trabajar, sino justamente no tener trabajo. Por eso quise perfeccionarme en este oficio para conseguir algo más estable y prometedor. Y mi familia me apoyó totalmente. Cuando les dije que iba a hacer este curso, mis hijos mayores de 25 y 18 años se ofrecieron para cuidar a los tres más chicos de 11, 9 y 7 para que yo pudiera cursar y estudiar tranquila. Por eso me siento orgullosa de haber obtenido el título', dijo la mujer.


Laura también agregó que se siente "afortunada' de haber podido ingresar a este curso que en un principio estuvo destinado solamente a los hombres. Dijo que gracias a la intervención de la asociación Mujeres por San Juan y de la Red de Mujeres Mineras, se logró tener un cupo femenino. "Sabemos que es un trabajo pesado y difícil, pero no imposible para nosotras. Además, hemos recibido una excelente preparación. Ahora estamos esperando que nos convoquen para subir a la montaña a hacer las prácticas. Eso me preocupa un poco porque hay que manejar maquinaria que cuesta millones de dólares. Pero es más grande la emoción de poder hacerlo y la esperanza de que me llamen para contratarme', dijo la flamante egresada.


 

>> CHARBEL MULLEADY (26)
  • Doble formación en minería

Desde chico, a Charbel Mulleady le inculcaron la cultura del trabajo. Y es por eso que con tan sólo 26 años es preceptor y propietario de un almacén. Pero como la estabilidad en el país no es confiable y él no sabe hasta cuándo podrá vivir de lo que gana con el negocio, ahora decidió capacitarse como perforista minero. Antes hizo un curso de manejo de camiones mineros. Está a la espera de que lo llamen para ofrecerle un trabajo en el rubro. "Mi abuela se enteró por DIARIO DE CUYO sobre el curso de Perforista Minero y me contó. Sin dudarlo me inscribí, aunque con pocas esperanzas de poder ingresar porque eran 10.000 los inscriptos, pero el destino quiso que tuviera esta oportunidad. Y estoy muy feliz porque desde hace mucho tiempo que me vengo preparando para trabajar en la minería. Hice una capacitación en el manejo de camiones mineros y tengo la licencia de conducir profesional. Espero que con este nuevo perfeccionamiento consiga un trabajo', sostuvo el joven.


Charbel contó que ya presentó curriculum en algunas empresas mineras, pero que aún no ha recibido ninguna oferta. De todos modos, le interesa más que algunos de sus compañeros de curso consigan trabajo, ya que lo necesitan más que él. "Yo no soy casado ni tengo hijos y me las arreglo con lo que gano en el almacén. Pero hay compañeros que la están pasando muy mal económicamente y necesitan un trabajo estable y bien remunerado de forma urgente. Algunos ya consiguieron trabajo en Salta y en Jujuy como perforistas. Estamos esperando que vuelvan para que nos cuenten cómo es el trabajo y qué debemos tener en cuenta', contó Charbel.

>> CECILIA GALLARDO (38)
  • Superar desafíos con esfuerzo

Cecilia Gallardo creció en el seno de una familia minera, pero nunca participó en una actividad relacionada a este rubro. Sin embargo, las ganas de crecer profesional y económicamente la llevaron a realizar el curso de Perforista Minero. Fue una de las 15 mujeres que pudieron hacerlo, ya que este número representa el cupo femenino que incluyó la capacitación en este oficio. "Estuve viviendo en Córdoba, pero por la pandemia regresé a San Juan. Y conseguí trabajo como administradora de un hostel en Villa Calingasta. Nunca me quejé de este trabajo, pero pensé: ya tengo 38 años y una hija chiquita, y necesito mejorar la situación económica de ambas. Por eso ingresé al curso de Perforista Minero con la expectativa de conseguir un trabajo estable. Sé que será más sacrificado, pero estoy dispuesta a hacer el esfuerzo y enfrentar este nuevo desafío', sostuvo Cecilia.


La mujer agregó que mientras cursaba esta capacitación comenzó a interiorizarse en los pormenores del trabajo de un perforista minero. Dijo que no le preocupó el tener que manejar máquinas de gran porte porque los profesores les dieron una excelente preparación. Y que aunque nunca manejaron una de estas máquinas, las conocen como la palma de la mano. Sí le angustia, en cambio, el estar tantos días lejos de su hija. "Se trabaja 14x14, es decir trabajás 14 días en la montaña y descansás 14. Sé que a ambas nos va a costar mucho, pero ya le estoy hablando del tema a mi nena para que lo comprenda. También ya estoy presentando curriculum en algunas empresas para que me tengan en cuenta cuando haya una vacante', dijo la mujer.