En el sector semillero local, siempre se buscan los avances en materia de innovación, tecnología y desarrollo integral. Lentamente esta actividad rural ha apuntado a la optimización de los resultados tanto a campo, con mejores labores, incorporación de fertilizantes modernos, uso de coadyuvantes, foliares y tensioactivos, asimismo en las distintas tareas mecánicas, la suma del riego por goteo y actividades más finas, como selección de materiales, polinizaciones dirigidas, uso de jaulas y ensayos de materiales. En el área poscosecha, es decir, cuando la recolección del campo llega al galpón de procesamiento, también en San Juan hay novedades de relevancia, lo que indica el innegable liderazgo que mantiene nuestra tierra en este rubro agrícola, hoy llamada a nivel mundial "la industria de las semillas".

Y en el campo de la incorporación de maquinarias específicas, más exquisitas por la fina y delicada labor que desempeñan, es un orgullo informar que la empresa familiar de Antonio Sánchez Sánchez, agregó una selectora de color para la terminación de su limpieza.

La firma, en la que trabajan en equipo con sus hijos Mauricio, Federico y Beatriz, en su planta industrial de proceso, ubicada en calle Mendoza, entre 11 y 12, de la Villa Aberastain, del departamento Pocito, instaló una Pikasen Alpha Plus, de la conocida compañía internacional Satake. Esta última tiene sede en Hiroshima, Japón, pero se ha extendido con núcleos en Tailandia, Indonesia, China, India, Australia, Reino Unido, Estados Unidos y Brasil.

Dialogamos con Mauricio, ingeniero agrónomo y experto en estas tecnologías, quien dijo a Suplemento Verde, "el modelo FMS 2000F, de Satake Corporation, es del tipo RGB, trabaja con tres colores, tiene cámara posterior y anterior, reconoce 8 millones de colores, tiene un rendimiento de entre 800 y 1.000 kilos en una jornada de 8 horas".

Prosiguió "además, las cámaras detectan los cambios de color, entre el aceptado (en nuestro caso las semillas de cebollas, zanahorias, o las que nosotros elijamos) y el rechazo. La separación se produce por acción del aire, con algo de 50 ejectores, boquillas, que en principio trabajan como una impresora de chorro de tinta. O sea, un impulso de aire extrae la partícula rechazada, y la saca de la grilla normal de caídas".

También, además del color, se puede separar por módulos de formas, con un gran número de posibilidades de extracción de distintas partículas no deseadas.

Continuó el productor "la máquina se puede utilizar de dos maneras diferentes, una es por recetas, es decir, a nivel básico, indicando cuál es el material comercial aceptado y cuál es el rechazado. Y subiendo un nivel, haciendo programaciones, a niveles finas, con gente más entendida en esta temática, con el tema de los colores, se usa una herramienta de distribución de colores, en 3D, para la separación deseada. Y esto mismo con los innumerables módulos de formas. Mientras exista intención y algo más, conocimiento, con esta sorter óptica se pueden hacer maravillas".

Se puede regular todo. Es muy versátil y modificable.Simientes, un área de la producción que avanza sin descanso.