Imponencia en su máxima expresión. Por un lado las dimensiones y ubicación de la mina a 4500 metros sobre el nivel del mar. Por el otro, la majestuosidad de la naturaleza y su presencia implacable. Con estas características a cuestas y en el Mes de la Mujer, las candidatas a Reina Nacional del Sol y mujeres periodistas de medios nacionales y locales, visitaron Veladero en Iglesia. La Reina y Virreina de la Minería, como las paisanas de la Fiesta de la Tradición en Jáchal, también conformaron el grupo.

Lo cierto es que la naturaleza se hizo se sentir, puesto que más de una vivió en carne propia los efectos del mal de altura. Aún así, nada empañó un recorrido que incluyó las instalaciones de la mina (hotel, open pit, taller de mantenimiento y el área de procesos), en el marco de la campaña “Veladero en Rosa” que comenzó el Día Internacional de la Mujer, 8 de marzo, y está destinada a la prevención del cáncer de mama.

Las características de esta campaña, centrada en el color rosa como distintivo de lo femenino, dieron a esta visita un toque particular: lugares estratégicos de la mina contaban con banners informativos de la enfermedad, también había banderines rosados en los vehículos y hasta se distribuyeron stickers con un logotipo alusivo.

Durante el recorrido, la visita al open pit (cantera a tajo abierto) en el filo Federico y el camión fuera de ruta con tolva pintada en rosa, acapararon la atención por sus dimensiones y estuvieron entre los más fotografiados. “Me sorprendió el tamaño que las maquinarias tienen aquí, todo es gigante y la verdad es que uno siente pequeñito”, comentó Ana Laura Suárez, la representante de Chimbas.

Por su formación como estudiante en Ingeniería de Minas, María Florencia Martín, la Virreina de la Minería, dio una visión más acabada: “Veladero es impresionante porque es una ciudad montada a cuatro mil metros, es un gran trabajo ingenieril y el tema del generador eólico impacta mucho. La primera vez que vine fue hace cuatro años y la verdad que la mina avanzó un montón en este tiempo”.

Veladero también causó su efecto entre los periodistas llegados desde Buenos Aires. Liliana Grahl, del Inversor Energético y Minero, resumió al lugar como “impresionante”. “Me sorprendió el lugar y los modos de trabajo. Más que por un sentido periodístico, vine a la mina para conocerla, porque uno debe conocer los lugares sobre los que escribe. Estoy impactada”, reconoció Liliana.

Un apartado aparte merece el Caterpillar 793 con tolva cargadora pintada en rosa. En un mundo predominantemente de hombres, el color causó su efecto. Sabrina Montiveros, asistente de la Superintendencia de Operaciones, contó que percibió una cierta incomodidad entre los operarios cuando debió transmitirles la iniciativa. En particular la gente dedicada al mantenimiento de estos camiones, que debía comenzar a usar mamelucos en color rosa (esta indumentaria es descartable y el color habitual es el blanco).

Por suerte, la aceptación fue mejor de lo esperada. “Cuando supieron qué simbolizaba el rosa y a qué está destinada la campaña, lo aceptaron y ofrecieron sin reparos su colaboración. Sin dudas es una gran consideración de los hombres hacia las mujeres”, expresó Sabrina.
La idea de la tolva pintada en rosa se tomó de una experiencia previa realizada en Cowal, mina de Barrick ubicada en Nueva Gales del Sur, Australia, en donde el camión se pintó de rosa por completo. En San Juan, el ya particular Caterpillar seguirá pintado de este color hasta que cesen sus funciones.