Entrevistamos al Ing Agr. Juan Manuel Raigón, de la Agencia de Extensión Rural San Martín del INTA, para conocer cómo está hoy este frutal en cuanto a precios, rendimientos y tendencias. Esto nos respondió: "es una especie de Prunus que se adapta a las condiciones edafoclimáticas de San Juan. La superficie actual cultivada es de unas 500 hectáreas y la edad promedio de los montes es de 15 a 20 años. Las variedades cultivadas son del tipo cáscara de papel o "californianas", de floración temprana e intermedia y de muy buena calidad comercial de sus frutos. Básicamente son: Non Pareil, Peerles, Nec Plus Ultra, Emilito INTA , Paper Shell. En los últimos años se están incorporando almendras de cáscara dura o "variedades españolas" de origen europeo, entre las cuales la más relevante es la variedad Guara. Los montes se encuentran implantados en distanciamiento de 5m x 5m y hasta 6m x 6m; entre 400 a 300 plantas/ha.
Propuestas tecnológicas a implementar para llevar adelante un cultivo exitoso:
1.- Introducción de un correcto número de colmenas al momento de floración.
Las experiencias realizadas por INTA, en fincas de productores, indican que son necesarias alrededor de 8 colmenas por hectárea, correctamente preparadas, para lograr una adecuada polinización y por lo tanto alcanzar rendimientos comerciales importantes (promedios de 1.000 a 1.300 kg de pepita por hectárea).
2.- Realización de riegos oportunos y de acuerdo a las características de suelo de cada propiedad.
El almendro es un cultivo que, al igual que otros frutales, tiene una demanda de agua cercana a 10.000 m3/ha/año, distribuidos en el ciclo de cultivo. Tiene dos épocas de demanda de agua importante. La primera, Fase I, desde floración, cuaje y desarrollo del fruto. La segunda, durante el periodo de llenado del grano, coincide con los meses de diciembre y enero. En esta última etapa un estrés hídrico produce disminuciones muy importantes en los rendimientos, fundamentalmente por pérdida de peso y pérdida de calidad (almendras deshidratadas y arrugadas que descalifican al producto).
En post-cosecha el riego permite mantener una correcta absorción de nutrientes que favorece la acumulación de reservas y una perfecta diferenciación de las yemas florales. Este fenómeno tiene lugar en los meses de febrero a marzo.
También es importante la fertilización post-cosecha, fundamentalmente con nitrógeno, para permitir la acumulación de sustancias de reserva que serán utilizadas en el mes de agosto, cuando comienza la floración, y la planta debe vivir a expensas de esas sustancias. De lo contrario hay disminuciones importantes de producción.
3.- La lucha contra accidentes climáticos.
Son las heladas tardías y el viento Zonda.
Los vientos Zonda aceleran los tiempos en que se producen los diferentes estados fenológicos, anticipando la fecha de floración del almendro y provocando una mayor exposición a periodos de heladas tardías, frecuentes en el mes de agosto. Las heladas tienen alta frecuencia de ocurrencia en el mes de agosto y provocan daños importantes en los frutitos recién formados a finales de ese mes y primeros días de septiembre, por ser estos órganos los de mayor sensibilidad a las bajas temperaturas.
La intensidad de las heladas es mayor cuando van precedidas de vientos Zonda.
4.- El control de plagas y enfermedades.
La zona productora es muy poco afectada por problemas sanitarios. Las plagas más importantes son los ácaros y la grafolita, y entre las enfermedades, viruela.
5.- Introducción de nuevos materiales.
Desde el INTA se está trabajando desde hace varios años en el tema. Para ello se instaló en la EEA San Juan una colección con variedades de almendros provenientes de diferentes lugares del mundo, y con variedades americanas o de cáscara de papel y de cáscara dura.
Las variedades de cáscara dura tienen un sabor más intenso, característico (sabor a amigdalina) y presentan un color más oscuro. El material más destacado es Guara, de floración 15 días más tarde que Non Pareil, muy buen rendimiento y adaptación a las condiciones de San Juan. Fue introducida en la Provincia en el año 1980 y recién se difundió a partir del año 2005 aproximadamente. Este material es originado en una selección clonal realizada en el CITA de Aragón, España.
Creo que en el tema varietal, antes de desarrollar explotaciones comerciales con estos materiales, es imprescindible experimentarlos previamente, para evitar desaliento o fracasos si no se cumplieran las expectativas generadas.
Con respecto al consumo de estos nuevos materiales de cáscara dura, hay que recordar que el paladar argentino está acostumbrado a los materiales de cáscara de papel. Por lo que sería oportuno trabajar con materiales nuevos de cáscara de papel, muy interesantes, que se están utilizando en EEUU y Chile.