La sensación que reina en los centros neurálgicos del sector comercial de Jáchal e Iglesia es de esperanza, de anhelo hacia un cambio profundo y beneficioso de la actividad en esos departamentos, debido a la realización del túnel de Agua Negra. "Será el despegue de Jáchal", aseguró una comerciante. "Va a ser un beneficio muy grande para Iglesia", destacó un empresario. "Creo que aún no nos imaginamos la importancia de lo que viene", resaltó el dueño de un negocio. Esas son algunas de las expresiones que proliferan en los 2 departamentos ante la inminente realización de la megaobra que permitirá a San Juan un tránsito fluido hacia el Pacífico.
El túnel estará enclavado en Iglesia y la ruta clave que lo contiene es la 150, que une el departamento cordillerano con Jáchal. Esa vía es la pieza esencial del corredor bioceánico, que integrará a Brasil, Argentina y Chile. Por esa razón, los pobladores tienen "las mejores expectativas" y vislumbran un "desarrollo y crecimiento sostenido" por una oleada permanente en todo el año de turistas que demandarán hospedaje, lugares para comer, diversos artículos regionales para comprar y combustible y repuestos para los vehículos, entre algunos de los servicios que pueden generarse por el proyecto.
"Estamos esperanzados de que el túnel traiga una mejora. Esto está muerto", aseguró Héctor Ygonett, dueño de un almacén en Jáchal. El comerciante espera que la obra y su influencia se convierta en un polo de desarrollo en el departamento. Con esa ilusión, Ygonett remarca su idea de que su negocio pueda crecer". Por otro lado, María del Carmen Espíndola es empleada de "El gato regalería" y destaca que Agua Negra "va a favorecer a Jáchal, vamos a crecer con la conexión con Chile". La joven abrió un negocio personal (una fotocopiadora con anexo de venta de ropa) pero sigue trabajando en la regalería. A tal punto llega el sueño de crecimiento en base al túnel que María del Carmen espera independizarse y desenvolverse sola con su propio emprendimiento.
En Iglesia, Mario Cordero tiene una ferretería hace un mes y medio y aguarda que por el viento de cola de la obra del túnel y el corredor bioceánico, "lo que se mueva es la construcción de cabañas y casas", para poder colocar sus productos. Sergio Cámera, dueño del hotel de campo "El viejo carretón", manifestó que Agua Negra "va a ser beneficioso. Van llegar distintos profesionales, como arquitectos e ingenieros, y más turistas que van a necesitar hospedarse".
Las expectativas de la gente de ambos departamentos son altas e irán aumentando a medida que el túnel comience a hacerse realidad.
