Lejos quedaron en el tiempo las valijas de los abuelos o bisabuelos inmigrantes. Ahora llevar el equipaje, gracias a la tecnología, será mucho más fácil. Al menos, la nueva propuesta tendrá herramientas para evitar que se pierda en una cinta del aeropuerto o la bodega de un colectivo, entre otras muchas aplicaciones de suma utilidad para quien tiene que viajar.

Un detalle que no es menor para el orgullo nacional es que un grupo de argentinos tiene en sus manos la autoría de dicha invención, la que presentaron en las últimas horas y para la que buscan financiamiento mundial para poder concretar.

La valija en cuestión es Bluesmart, un proyecto que encararon Martín Diz, Alejo Verlini y Diego Saez-Gil bajo la dirección de Tomi Pierucci. Son argentinos, tienen entre 28 y 33 años y actualmente residen entre Estados Unidos y China. Su experiencia personal como viajeros frecuentes y perdedores de equipaje, más el interés de cada uno por la tecnología, fue lo que los inspiró para lograr este invento.

Entre otras características, Bluesmart es una valija carry-on, es decir, aquellas que tienen rueditas -para ser gráficos- y que suele llevarse como equipaje de mano.

La gran novedad es que tiene un candado que se abre y se con una aplicación del celular, que también puede bloquearse automáticamente cuando pierde la conexión con el teléfono del propietario; además posee una batería interna para recargar el teléfono, la tablet o la notebook -entre otros dispositivos- mientras se espera en el aeropuerto o la terminal de ómnibus. Pero no es todo. La llamada valija inteligente trae como accesorio una balanza interna para indicarle al turista se deberá pagar exceso de equipaje o no.

Este elemento de marroquinería tiene incorporado un bolsillo especial para guardar los dispositivos electrónicos y sacarlos fácilmente al momento de tener que pasar por los controles de seguridad.

Como si fuera poco, Bluesmart también tiene un GPS para determinar la ubicación física -y comunicarla- si se despacha y termina demorada, en otra cinta de entrega de equipaje, por ejemplo.

La idea de los inventores es que más que un "bolso con ruedas” sea un asistente personal que de una solución a los 25 millones de valijas que se pierden o rompen por maltrato en los aeropuertos del mundo.

Se estima que -de conseguir financiamiento para concretarla- la valija esté en el mercado en agosto del año próximo y que cueste 450 dólares.