El papa Francisco acaba de anunciar, en el habitual rezo dominical de Ángelus, la lista de nuevos cardenales que creará en un Consistorio el próximo 22 de Febrero, para la fiesta de la Cátedra de San Pedro. Un total de 16 purpurados electores y 3 arzobispos eméritos formarán parte del Colegio Cardenalicio a partir de febrero.

El grupo está compuesto por 19 prelados de los cuales 16 cumplen actualmente funciones en la curia romana o en las sedes episcopales de sus países y otros 3 arzobispos eméritos a los que les concede la púrpura en reconocimiento de los valiosos servicios prestados a la Iglesia. Ellos son:

-monseñor Pietro Parolin, Arzobispo titular de Acquapendente, Secretario de Estado.

-monseñor Lorenzo Baldisseri, Arzobispo titular di Diocleziana, Secretario Generale del Sinodo.

-monseñor Gerhard Ludwig Müller, Arzobispo-obispo emérito de Regensburg, Prefecto de La Congregación para La Doctrina de La Fe.

-monseñor Beniamino Stella, Arzobispo titular de Midila, Prefecto de La Congregación para el Clero.

-monseñor Vincent Nichols, Arzobispo de Westminster (Gran Bretaña).

-monseñor Leopoldo José Brenes Solórzano, Arzobispo de Managua (Nicaragua).

-monseñor Gérald Cyprien Lacroix, Arzobispo de Québec (Canadá).

-monseñor Jean-Pierre Kutwa, Arzobispo de Abidjan (Costa de Marfil).

-monseñor Orani João Tempesta, O. Cist., Arzobispo de Río de Janeiro (Brasil).

-monseñor Gualtiero Bassetti, Arzobispo de Perugia-Città della Pieve (Italia).

-monseñor Mario Aurelio Poli, Arzobispo de Buenos Aires (Argentina).

-monseñor Andrew Yeom Soo jung, Arzobispo de Seúl (Corea).

-monseñor Ricardo Ezzati Andrello, S.D.B., Arzobispo de Santiago del Chile (Chile).

-monseñor Philippe Nakellentuba Ouédraogo, Arzobispo de Ouagadougou (Burkina Faso).

-monseñor. Orlando B. Quevedo, O.M.I., Arzobispo de Cotabato (Filipinas).

-monseñor Chibly Langlois, Obispo de Les Cayes (Haití).

Mientras que los tres Arzobispos eméritos son: monseñor Loris Francesco Capovilla, Arzobispo titular de Mesembria; monseñor Fernando Sebastián Aguilar, C.M.F., Arzobispo emérito de Pamplona y monseñor Kelvin Edward Felix, Arzobispo emérito de Castries.

La distribución

Analizando los nombramientos, salta a la vista por una parte una continuidad de criterio en cuanto que llama al cardenalato a colaboradores suyos de la curia romana. Éstos son el Secretario de Estado, el Prefecto para la Doctrina de La Fe, el Secretario General para el Sínodo de los Obispos y el Prefecto para la Congregación del Clero.

Más numeroso es el grupo de los obispos titulares de diversas diócesis del mundo: Inglaterra, Canadá, Costa de Marfil, Nicaragua, Brasil, Argentina, Italia, Corea, Chile, Santiago de Chile, Burkina Faso, Filipinas y Haití.

Por continente de los obispos residenciales: 8 europeos, 7 americanos, 2 africanos y 2 asiáticos. De los miembros de la Curia Europa suma cuatro más dos de los arzobispos eméritos. De estos últimos, Oceanía contará con uno.

Las novedades

Ha dejado fuera de la lista algunos obispos de sedes italianas que se consideraban "cardenalicias” y ha dado por primera vez cardenales a tres diócesis que no eran "cardenalicias” Perugia-Città della Pieve (Italia), Cotabato (Filipinas), Les Cayes (Haití).

Se mantiene el criterio de universalidad del Colegio de Cardenales. Una representación más plural en el Supremo Senado de la Iglesia da la ocasión para que el Papa, más allá del grupo de ocho que ya lo asiste en su gobierno, pueda sentir las voces de "todas las Iglesias” esparcidas por los cinco continentes.

Otra línea que marca esta designación es que se mira a las personas que pueden colaborar más eficazmente y que se encuentran en capacidad de captar lo que las "periferias existenciales y geográficas” tienen para decir a toda la Iglesia.

Camino de reforma

Según fuentes cercanas al Santo Padre, su propósito de reforma se concretiza más que en cambios bruscos, en cambios estratégicos; esto es, colocar en lugares claves personas que garanticen la necesaria renovación de las estructuras.

Otro criterio para la reforma, que se puede intuir, es "el de dejar caer lo que naturalmente tenga que caer", evitando decisiones traumáticas que lastimen a las personas.

En casos clamorosamente escandalosos, aún usando de misericordia y paciencia, se actúa con celeridad y cuidando al más débil.

Se conserva siempre la certeza y la esperanza que "la conversión pastoral", que lleve a suplantar "estructuras caducas" que no ayudan a vivir y transmitir "el gozo del Evangelio", será obra de las bases. En definitiva la Iglesia Universal se concretiza en cada una de las iglesias particulares (las diócesis) y, a su vez, cada parroquia es la estructura más cercana a las personas y sus familias. Dentro de éstas últimas cada capilla, grupo o institución laical es el núcleo más vital desde el que debe comenzar la renovación. Una comunidad renovada es una comunidad convertida y capaz de vivir y anunciar el Evangelio.

El ejemplo arrastra

En todo caso es claro que el Papa hace y proclama. Primero son los hechos, incontestables como lo es la realidad contra la que no hay argumento, y luego el discurso, la exhortación a encarnar una reforma. Algunos ejemplos: vive sencillamente y reclama vida sencilla especialmente a los sacerdotes. Va a las periferias, nombra cardenales que se encuentran allí, invita a mirar la realidad desde las periferias y no desde el centro. Llama a ocho cardenales para que lo aconsejen y ayuden en el pastoreo de la Iglesia Universal, insiste en La colegialidad del Episcopado.

Allí está el papa Francisco, que suscita mucha esperanza y multiplica las adhesiones. Esperemos que quienes aplauden sus decisiones tengan la misma audacia para dejar los "viejos odres" y dejarse renovar por el "vino nuevo" que siempre alegra las fiestas de bodas de Cristo y de su Iglesia.