La bióloga Mariana Allasino detectó "nidos construidos y se encontró uno que tenía tres celdillas formadas con dos tipos de plástico como único recurso".


En el marco de la tesis doctoral de la bióloga Mariana Allasino, investigadora del IPAF Cuyo, se detectó una sorpresa científica mundial: un nido de abeja construido completamente de material plástico.


El IPAF Cuyo es una institución que lleva adelante importantes investigaciones y desarrollos tecnológicos para los agricultores familiares argentinos y en este marco la bióloga Allasino compartió este descubrimiento publicado en destacadas revistas científicas internacionales con Suplemento Verde de DIARIO DE CUYO.


"El objetivo de este estudio es analizar la calidad del servicio ecosistémico de polinización de cultivos para semilla hortícola en función de la flora espontánea presente en los bordes del cultivo, el paisaje agrícola circundante y la estructura de las comunidades de plantas y polinizadores. Para ello, desde hace dos años, se trabaja en fincas de productores de la Federación de Cooperativas Agropecuarias de San Juan Ltda. (Fecoagro)", indicó la profesional en relación a esta entidad que asocia más de 660 familias sanjuaninas en la producción y comercialización de simientes hortícolas.


POLINIZADOR

Agregó que "como es de amplio conocimiento, los polinizadores son un componente crítico de los agroecosistemas. Sin embargo, están disminuyendo a nivel global debido principalmente al disturbio humano. Entre los polinizadores más eficientes se encuentran las abejas. Se estima que existen alrededor de 20 mil especies. Entre ellas, se encuentra la familia Megachilidae". 


"Los Megachilidos son abejas solitarias, es decir que la hembra construye un nido donde coloca sus huevos, no existen abejas obreras, reina, ni producen miel. Muchos de los Megachilidos nidifican en cavidades preexistentes utilizando materiales recolectados del paisaje como barro, piedras, hojas, pétalos y resinas para construir las celdillas de cría. Cada celdilla alberga una larva que dará lugar a una abeja adulta", explicó.



EL DESCUBRIMIENTO

La bióloga Allasino relató que "durante la primavera-verano de 2017, se trabajó en la descripción de los polinizadores de la achicoria (Cychoriumintybus) para producción de semilla en la localidad sanjuanina de Pocito. Para ello se colocaron 63 trampas nido en los bordes del cultivo. Las trampas nido son bloques de maderas de 2x2x12 centímetros con un orificio en uno de sus extremos. Estas trampas son utilizadas por las abejas solitarias para construir sus nidos". 


"Entre los nidos construidos, se encontró uno que tenía tres celdillas formadas con dos tipos de plástico como único recurso: plástico celeste de consistencia de bolsa, y plástico blanco, más grueso que el anterior. Debido a que la única larva presente en las celdillas estaba muerta no se pudo determinar la especie que construyó el nido. Sin embargo, podría tratarse de Megachilerotundata (Fabricius), una especie exótica que ha sido introducida con fines comerciales y se encuentra ampliamente distribuida en Argentina", afirmó la investigadora.


Y finalmente comentó que "este estudio, publicado este año en la revista francesa Apidologie, es el primero a nivel mundial en reportar el uso de plástico como único recurso para la construcción total de un nido de abeja. La importancia del mismo es que demostraría la flexibilidad adaptativa que tendrían ciertas especies de abejas frente a los cambios en las condiciones del medio".
 


> Trabajos en San Juan

En relación a este tema, la bióloga Mariana Allasino, del Instituto de Investigación y Desarrollo Tecnológico, para la Agricultura Familiar de la Región de Cuyo (INTA-IPAF Cuyo) en conjunto con Conicet, comentó a Suplemento Verde que "la revista que publicó el trabajo es Apidologie, Revista oficial del Institut National de la Recherche Agronomique (INRA) y Deutschen Imkerbundes e.V. (D.I.B.). Apidologie es una revista indexada dedicada a la biología de los insectos pertenecientes a la superfamilia Apoidea.

Megachile rotundata. Fuente: Internet.


Recordemos que INTA San Juan lideró en la década del 80 los estudios de polinización en cultivos como la producción de semillas de alfalfa, importando estas "abejas cortadoras de hojas", desde Estados Unidos y Canadá. Con ellos, en domicilios estratégicamente ubicados en los lotes de campo, se incrementaron notablemente los rendimientos por hectárea de simientes sanjuaninas.