Lejos de abatirse, de bajar los brazos, inclusive de conformarse esperando que la situación desatada por la pandemia mejore, los docentes de la Escuela de Capacitación Laboral Obreros del Porvenir decidieron -y nunca mejor dicho- tomar las mejores herramientas que tenían a mano y ponerse a trabajar. Y es literal. Porque el profesor de Mecánica puso a funcionar la computadora para poder saber qué le pasaba al auto, los de Electrónica, Electrodomésticos y de Reparación de PC agarraron sus pinzas y destornilladores. Inclusive en la cocina, encendieron las hornallas. 


Es que ante la baja de más de la mitad de la matrícula (con su consecuente disminución de la recaudación de las cuotas) y por las dificultades para dar todas las clases prácticas de manera virtual, armaron una bolsa de trabajo y empezaron a ofrecer desde hace apenas unos días el servicio de reparaciones de todo tipo de artefacto y elementos del hogar, inclusive automóviles y hasta cuestiones de carpintería y herrería. Con un detalle que no es menor: los arreglos tienen, en promedio, cuestan un 30 y 40 por ciento menos que realizarlo en un taller común y corriente. Ya que lo que se busca con este accionar, no es tener ganancia para los técnicos y especialistas, sino recaudar los fondos necesarios para el pago de algunos sueldos -NDR: que no están cubiertos por el Estado- y el sostén del edificio ubicado en la Avenida Alem pasando Córdoba.

"Los mismos profesores y algunos socios integrantes de la comisión directiva de la sociedad propietaria de la escuela en búsqueda de hacer alguna acción que pudiera generar dinero para afrontar la situación, encontramos que entre nosotros hay mano de obra calificada. Por supuesto que tuvimos que armar una logística para abrir la escuela en tiempo de pandemia porque allí están todos los elementos y herramientas necesarias. La iniciativa es voluntaria y desinteresada por parte de quienes accedieron a ofrecer sus servicios", cuenta la docente Elisa Núñez, la vocera de la escuela.


Nobleza obliga decirlo, en esta escuela que es pionera en la educación con fines laborales, tienen experiencia sobrada en arreglos y reparaciones. De hecho, durante el cursado normal de las especialidades puntuales que trabajan con artefactos, electrodomésticos y equipamiento de audio por ejemplo, muchas veces eran los mismos docentes o personal del establecimiento, quienes llevaban sus dispositivos o aparatos rotos o sin funcionar para que el profesor pudiese dar las clases y enseñar contenido, basándose en los compostura de los mismos. Pero ahora, la práctica se abrió al público.


"Quienes trabajamos en la escuela tenemos el espíritu altruista que la caracteriza a la institución desde su creación, hace 105 años. Este es un colegio privado que debe sostenerse con las cuotas de los alumnos y los socios de la sociedad propietaria (que a su vez son los mismos profesores), es así que en esta y en varias ocasiones en las que el país y la provincia han sufrido crisis, el personal ha puesto solamente su voluntad sin recibir nada a cambio para salir adelante. En esta oportunidad, con fondos recaudados por los arreglos, se afrontan los sueldos del personal administrativo y de maestranza, los gastos de impuestos y servicios y el mantenimiento del edificio", explican los docentes involucrados en la iniciativa que por el momento no incluye alumnos debido a las prohibiciones surgidas por la pandemia. Por ahora, hay uno o dos docentes de cada especialidad, trabajando en estas tareas, pero no se descarta recurrir a otros del plantel -por ejemplo en Mecánica del Automotor hay 6 profesores- para cubrir la demanda.


De todo un poco


Quien tenga algún electrodoméstico -desde microondas, equipos de audio y video, televisores, monitores, hornos eléctricos, secadores de pelo, planchitas, minipimer, etc.- deberá recurrir al profesor de Electrónica, Ricardo Daniel Echegaray.


Mientras que quien recibe los aparatos de mayor porte, como aires acondicionados, lavarropas, heladeras, es el profesor Nelson Albanesi de Refrigeración, quien se encarga desde cambios de burletes, de motor, de compresor de carga de gas refrigerante en las heladeras, limpiezas de aires acondicionados, cambios de plaquetas electrónicas o fuelles, reparación de tambor, cambio de rodamiento o de bomba de agua, entre otras tareas.


Fernando García enseña en la especialidad Reparación de PC y por ende, es un experto en el arreglo, mantenimiento, desinfección de equipos PC, notebook y netbook. "Este trabajo consiste en la limpieza completa de los equipos, no sólo en su exterior, sino también en su interior para garantizar que los sistemas de refrigeración de cada equipo funcionen con normalidad. Además se hacen chequeos sobre memorias, unidades de almacenamiento, sistemas operativos. Se instalan o reinstalan los sistemas operativos que el cliente necesite o que mejor se adapte a su equipo. También cambios y reparación de pantallas, flex, cargadores", asegura.

Por ejemplo, Andrés Montiel, el profesor de Mecánica del Automotor de 3º año, explicó que tienen todo lo necesario para hacer diagnóstico computarizado, scanner de vehículos a inyección electrónica, reparación en general, reparación y carga de aire acondicionado de todas marcas de automóviles. 


En todos los casos, si se necesitan repuestos, los docentes son quienes se ocupan de conseguirlos, previo acuerdo con el cliente. Ese costo, como en cualquier taller, queda a cargo del interesado.


Además se hacen trabajos y arreglos de herrería y carpintería, desarrollo de planos eléctricos, permisos municipales y habilitaciones de instalaciones eléctricas.


Para llevar a cabo estas tareas se ha diseñado una logística específica que comienza cuando la persona que tiene una necesidad de arreglo llama al 2645163957 (también se puede enviar un mensaje de Whatssap ó contactar al teléfono de la escuela -el 4223711 en horario de 15 a 18, de lunes a viernes-). Ese es el primer paso para llegar al docente especializado en cada rubro, con quien deberán acordar el traslado del artefacto, el precio, la disponibilidad de repuestos y la fecha de entrega del trabajo terminado, dependiendo de la complejidad de cada caso. Aparte, una vez que se lleva el artefacto a la escuela, se lo recepciona, se lo identifica y se completa un formulario (con un original para el cliente y un duplicado para la escuela para que el docente correspondiente sepa identificar el trabajo a realizar).

 


Para saber más


La escuela de Capacitación Laboral Obreros del Porvenir tiene una amplia oferta de oficios, carreras cortas y especialidades para estudiar: Administración Contable (liquidador de sueldos e impuestos y operador de PC), Dibujo Publicitario, Electricidad domiciliaria e industrial, Electrónica general e industrial con Especialización en audio y video y Mantenimiento de PC, Gastronomía Profesional, Industria de la madera; Revestimiento, lustrado y torneado de la madera, Metal mecánica, Mecánica del Automotor, Refrigeración y aire acondicionado, Tornería mecánica y Reparación de PC.


El cursado en todos los casos es de dos años, salvo en Mecánica del Automotor que se extiende por un año más. Otra particularidad es que como está diseñado para adultos mayores o personas que buscan una salida laboral, el cursado se hace en horario de 20,30 a 22,40.


Por estos días están dando clases de manera virtual. De todos modos, la dinámica se dificulta porque por el tipo de educación impartida se requiere una gran carga horaria para la práctica. 

Una institución emblemática


En junio de 1875 y por inciativa de un carpintero artesano, don Juan Onofre Aubone, nació la "Sociedad de Socorros Mutuos Obreros del Porvenir". En ese entonces, se aprobaron los estatutos y se reconoció su personería jurídica por el Poder Ejecutivo como institución para la "instrucción, moralidad y bienestar de sus asociados a fin que puedan cooperar eficazmente al bien público". Por supuesto que fue un buen proyecto para la época, que devino con la creación de una escuela de Artes y Oficios (que se inauguró el 10 de agosto de 1915) y una biblioteca.


Sábados de cocina


Los docentes de Cocina, uno de los fuertes de la escuela, también aportan sus saberes para recaudar fondos para la entidad. Es por eso que todos los sábados hacen un menú específico -que puede incluir empanadas criollas y tucumanas, pollo a la parrilla, a la mostaza, al disco, paella, ensaladas y pan casero- y venden sólo por encargue.