Entrevistamos al Dr. Jorge G. Valdez, especialista del Laboratorio de Análisis de Semillas, de la EEA La Consulta, del INTA, ubicada 110 km al sur de Mendoza. El motivo es conocer un resumen de la disertación brindada en la Sociedad Rural de San Carlos, en el marco del Programa "Unidos por la Cosecha 2020/21: Riesgos y Prevención de la Podredumbre Blanca en el ajo, y en la cebolla". 


Explicó a Suplemento Verde que "en la charla se comentó sobre el ciclo de la enfermedad, la manera en que se dispersa, la sobrevivencia de los esclerocios en el suelo de la finca y los resultados de ensayos con controladores biológicos y solarización llevados a cabo en fincas de productores con el asesoramiento del personal de INTA".

Semillas puras, tierras sanas de aliáceas y otros ítems, a analizar.


Las recomendaciones presentadas en la charla pueden resumirse en las siguientes: 


Cuando NO se tiene la enfermedad en la finca

  1. Siempre utilice ajo de semilla libre de la enfermedad. Para ello haga hacer análisis de patología en laboratorios habilitados por Senasa. 
  2. Todo equipo de servicios que contrate para ingresar al potrero de la finca (plantación, cosecha, movimientos) debe ser lavado con hidrolavadora y escurrido antes de ingresar al potrero. Los esclerocios pueden sobrevivir en la tierra que lleva una máquina que sale de una finca contaminada e ingresa a una finca sana. Toda la tierra y barro debe escurrir a un sitio que permita el secado por sol. Es importante que ese colado no vaya a canales de riego.
  3. Reserve semilla sana de muy buena calidad y controlada para plantar la temporada siguiente. 
  4. Si es productor de semilla de cebolla, y recibe las cebollas de otro lugar, tome una muestra representativa de 100 bulbos al menos y solicite análisis de patología para podredumbre blanca, antes de plantar los bulbos.



Cuando  se tiene la enfermedad en la finca 


5. Erradicación de las plantas sintomáticas cuando son pocas y están dispersas. Recorrer el potrero con pala y bolsas, y levantar las plantas con al menos un cono que abarque los 10 cm de tierra que rodean al cuello. Esto generará mucho peso, por lo que es recomendable llevar varias bolsas de las llamadas "paperas" que se recogerán al finalizar.
 6. Colocar las plantas y la tierra recogida sobre un playón de ripio o cemento donde no haya agua ni tránsito con el objeto que las plantas y la tierra se sequen por el sol. No debe ser mayor a los de 5 cm de altura. Mantener limpio de malezas.
7. Toda maquinaria que se introduzca a potrero contaminados, o al lugar de descarte de ajos, debe ser lavada con hidrolavadora y que toda la tierra y barro escurra a un sitio que permita el secado por sol. Es importante que ese colado no vaya a canales de riego.
8. Marcar con GPS de precisión u otra metodología los sitios donde estaban las plantas enfermas. Esto será necesario para llegar al mismo punto exacto en un futuro cercano (tres o cuatro años). Almacenar esta información de manera segura. 
9. Aplicar Tebuconazole 43% en sistema de empapado a razón de 1 l/ha (un litro por hectárea) en todo el cuartel. Es muy importante no aplicar de más dado que es tóxico. Este fungicida detiene la enfermedad, pero no cura a las plantas enfermas.
10. No utilizar ajo contaminado como semilla. El ajo que se arranque de la finca debe ser comercializado para consumo.
11. Cuando se arranque el ajo: Lavar con hidrolavadora la maquinaria que introduzca a la finca, antes y después del trabajo, tomando para el escurrido las mismas recomendaciones ya brindadas. 
12. Rotar. Luego del arranque, puede realizar allí otro cultivo a excepción de: ajo, cebolla, puerro, bunching, echalotte o cualquier otra aliácea. 
13. Si es posible realizar una solarización en el sitio afectado, hágalo. En INTA de La Consulta se han dirigido trabajos con esta técnica. 
14. Es recomendable que en los nuevos cultivos les aplique junto con la siembra, hongos biocontroladores del género Trichoderma. No podemos recomendar todavía una cepa, grupo de cepas, o especie. Pero es sabido que estos hongos son bioestimulantes y parasitan otros hongos, que en general son patógenos. 
15. Después de 3 años de estos tratamientos, vuelva a los lugares georreferenciados y tome cinco muestras de suelo en cada lugar, recogiendo los primeros 20 cm. Puede usar un muestreador de suelo de 2.5 cm de diámetro o una pala. Para ello haga un pozo, saque una rebanada de suelo en vertical de los primeros 20 cm del perfil. La rebanada debería tener 5 cm de ancho, 2 cm de largo y 20 cm de profundidad. Tenga la precaución que cada vez que coloque una muestra debe ser del mismo tamaño. Lleve la muestra a un laboratorio habilitado para análisis de suelo que determine Sclerotium cepivorum. El de INTA La Consulta puede ser una opción, o privados.


Más info: Laboratorio de Análisis de Semillas, EEA La Consulta, INTA CC 8 (5567) Mendoza. Mail: valdez.jorge@inta.gob.ar. Tel: "54 9 1160994474.