Con los calores y algunas lluvias aparecen diferentes plagas y enfermedades en el jardín. Si nos avocamos a observar el jardín, podremos mantenerlo en condiciones. De esta manera sabremos que nuestras plantas estarán a pleno y que su desarrollo no irá en paulatino detrimento. Recordar cuáles son las más comunes y que plantas atacan nos ayudará a estar atentos a los síntomas y dar soluciones a tiempo. Muchas de las plagas suelen extenderse en otoño, de tal manera que no deje de realizar la recorrida por el jardín.
Plagas comunes
*Las palmeras, cicas, cítricos y arbustos, suelen ser blanco de las cochinillas que se sitúan en el envés de las hojas, y dejan pequeñas manchas circulares amarillas. En muchos casos como un hongo conocido como fumagina u hollín, que produce una costra negra sobre las hojas e impide la fotosíntesis de la planta. Se controla usando insecticidas sistémicos (dimetoato, imidacloprid) o de contacto (mercaptation). En cuanto mueren los insectos, desaparecen los hongos de las hojas y las nuevas nacen limpias y brillantes.
*Los pulgones y moscas blancas: Los primeros atacan rosales, geranios, cítricos, hibiscos, jazmines, entre otros. Dejan las hojas con puntos brillantes, melosos y éstas se arrugan y se deforman. Pueden combatirse con productos químicos o mediante tratamientos orgánicos (alcohol de ajo o infusión de tabaco). Las moscas blancas se sitúan en el envés de las hojas. El follaje se amarillenta y cae.
*Los taladrillos: En los árboles puede haber ataques de taladros, que se detectan por los orificios que producen en los troncos y en las ramas, de los cuales puede salir savia o aserrín. En algunos casos cuando atacan ramas superiores, se aconseja cortarlas para impedir el avance, viendo que no queden galerías en la zona donde se podó. Se controla con insecticidas sistémicos inyectados en el árbol o regando con ese mismo producto, varias veces en la temporada.
*Los ácaros y arañuelas: Aparecen con el calor y los climas secos. Se combaten usando abamectina o tetradifon, haciendo 3 pulverizaciones foliares a intervalos de 7 días.
*Las orugas y hormigas: aparecen en verano y ocasionan fuertes daños. Comen hojas y arman hormigueros inmensos. Se combaten con alfacipermetrina y cipermetrina.
*Babosas y caracoles: Son moluscos de hábitos nocturnos que producen severos daños en las plantas herbáceas, dejan las hojas comidas y con trazas de hilos plateados de las mucosidades que los recubren. Se combaten en forma orgánica con cenizas de leña, para que al caminar sobre ellas, se desequen; o bien con cebos granulados a base de metacetaldehído.