La Argentina no solo vive de su afamado Malbec, por suerte. Ahora se le suma el blanco Torrontés, conocido también como Torrontés Riojano.

Según el INV desde 2004 a 2009, la exportación de vino fraccionado torrontés creció 217,22% en volumen y 337,56% en valor, y el año pasado, creció un 22,3% en valor FOB, a U$S 18,48 millones, y 18% en volumen, a 663.542 cajas de 9 litros. Y ya es el 4º varietal local más exportado, detrás del Malbec, el Cabernet Sauvignon y el Chardonnay.

Pero su potencial está dado, además, por la positiva difusión que comienza a tener mundialmente, sobre todo en Estados Unidos, su principal mercado.

Prestigiosos periódicos como The New York Times y The Hufftington Post señalan que pueda convertir en el varietal blanco equivalente al Malbec en tintos, cepa hoy de gran suceso en Estados Unidos.

El fenómeno se debe a que la Argentina crece mucho y el Malbec es un éxito

y en el mundo hay una serie de vinos blancos aromáticos, frescos, sin paso por madera, que son interesantes como el Alvariño, el Gewürztraminer, el Sauvignon Blanc, el Pinot Grigio o el Viognier donde el Torrontés puede ocupar su lugar importante.