Casi una tonelada de frutas y verduras fueron decomisadas y destruidas por personal del Centro Regional Buenos Aires Norte del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) al detectar que eran transportadas de manera irregular y sin la documentación que avalara su origen por lo que no suponía un riesgo para el consumidor. La carga - 450 kilogramos de banana y 500 kilogramos de ajíes trasladados en la bodega de un colectivo de pasajeros - fue detectada ayer, en un nuevo control a transportes en rutas bonaerenses, realizado en conjunto por Gendarmería Nacional de San Nicolás. El ómnibus fue detenido sobre la Ruta Nacional 9 (a la altura del kilómetro 225, mano sentido Rosario Ciudad Autónoma de Buenos Aires), y se constató que la mercadería no cumplía con las condiciones mínimas e indispensables para su traslado, además de carecer de su Documento de Transito Vegetal electrónico (DTV-e) y del rotulo de identificación sanitario exigido por norma. Bananas y los ajíes eran transportados en embalajes no aptos y de estado sanitario desconocido, motivos por los cuales se dispuso su incineración total, con el fin de evitar la dispersión de posibles plagas.