La franquicia Pura Piel llegó a San Juan con una propuesta que dará fin al problema de muchos hombres y mujeres vinculado a la eliminación del vello corporal. Esta técnica es aplicada por especialistas formados en el tema para dar garantía de seguridad, además de contar con una primera consulta para evaluar las características de cada persona, anticipó la propietaria de la franquicia, Carolina Moreno.
La fotodepilación por medio de Luz Pulsada Intensa (LPI) permite la eliminación del vello en cualquier parte del cuerpo de forma rápida, segura y sin dolor. La eliminación se hace mediante el principio de la fototermólisis selectiva: la luz de la máquina (foto) se transforma en calor (termo) y destruye (lisis) las células germinativas del folículo piloso de forma selectiva (únicamente es absorbida por la melanina o pigmento del pelo).
El tratamiento consiste en 6 a 8 sesiones aplicadas a lo largo de varios meses. En cada una de ellas el profesional evalúa las características propias de cada paciente y programa la máquina para llevar a cabo la depilación. La máquina de LPI emite disparos de luz que se convierten en fuentes de calor, que son absorbidos selectivamente por los folículos pilosos, destruyéndolos sin dañar los tejidos que están alrededor de cada pelo y sin lesionar la piel y su epidermis. El pelo de esta forma funciona como conductor de la energía para destruir el folículo piloso.
El innovador sistema de luz pulsada tiene un dispositivo que permite cubrir grandes zonas en el menor tiempo a diferencia de otros aparatos.
Es un método no invasivo que permite de una manera rápida y prácticamente indolora, eliminar el vello no deseado en forma amplia y con alto porcentaje de efectividad.
Se puede realizar en cualquier parte del cuerpo, tanto de mujeres como de hombres y cumpliendo con los requisitos se puede realizar en cualquier época del año.
La cantidad de sesiones (duran entre 15 y 50 minutos cada una), dependerá de la edad, sexo, región a tratar y su extensión, tipo de pelo, fototipo de piel, alteraciones hormonales, predisposición genética, entre otras.

