El Programa de Control y Erradicación de la Mosca de los Frutos recuerda a todos los particulares que aún posean naranjo, quinoto, pomelo, mandarino en sus hogares que pueden solicitar que las cuadrillas del Procem, debidamente acreditadas, procedan a la cura de los frutales como así también a la recolección y destrucción de los frutos dañados. Los limones son los únicos cítricos que no son atacados por la Mosca del Mediterráneo. Quienes tengan cítricos comuníquense al Procem al 4265224, de 8 a 14 horas.


Sin embargo, además de su importancia económica, la cosecha a tiempo del cultivo impide que las plagas agrícolas dañen los frutos, los destruyan y por ende generen importantes pérdidas monetarias.


Con la cosecha oportuna, se rompe la cadena de reproducción de los insectos que ponen sus huevos en los frutos al detener su desarrollo biológico y reducir la posibilidad que las larvas se alimenten de esos frutos.


De esta manera, disminuye sensiblemente la cantidad de moscas adultas que emergerán durante la próxima cosecha.


¿Cómo puede colaborar?


Permita el ingreso de las Cuadrillas del Procem, debidamente acreditadas, para que realicen tratamiento químico en sus frutales cítricos.


Los frutos infestados. ¿Cuál es el daño?


El daño producido por la picadura de la hembra en la oviposición, es un pequeño orificio en la superficie del fruto que forma a su alrededor una mancha amarilla si es sobre naranjas y mandarinas y de color castaño si se trata de duraznos o damascos.


Cuando la larva se alimenta de la pulpa favorece los procesos de oxidación y maduración prematura de la fruta originando una descomposición del fruto que queda inservible para el mercado.


Si se transportan frutos picados con larvas en fase inicial de desarrollo, se produce su evolución durante el traslado.


Importancia de las cosechas


Para todo productor o particular, el objetivo de la cosecha es cortar los frutos de los árboles para su posterior comercialización, consumo en fresco o industrialización. La porción de cosecha dañada o infestada es destruida enterrándose en un pozo y tapándose con tierra con huevos, larvas o gusanos deben enterrarse a 60 cm de profundidad. De ser posible, se debe aplicar algún insecticida en polvo o cal viva y ser tapado con tierra.


Si no aprovecha los árboles frutales, cámbielos por ornamentales.