Empezaron a aparecer los resultados, luego de mucho sacrificio y mucho tiempo de trabajo. En Mendoza, la comunidad integrada por la etnia huarpe, que está liderando un proyecto apícola, obtuvo sus primeros barriles de 300 kilogramos de miel cada uno. Esta actividad es posible debido a las acciones para el arraigo y el desarrollo de las comunidades aborígenes que llevó adelante el Programa para el Desarrollo de Áreas Rurales (PRODEAR), ejecutado por la Unidad para el Cambio Rural (UCAR).
La mencionada comunidad, ubicada en el sector noreste de la provincia de Mendoza, sobre el sector de Las Lagunas del Rosario. Ya se ha consolidado como asociación civil, conformada por 140 familias (alrededor de 300 personas ligadas por lazos de parentezcos, intercambios culturales, económicos y hasta espirituales).
La ingeniera agrónoma Muncha Díaz Cano, que coordina las acciones de este proyecto en esa región, indicó que es una gran satisfacción lograr los primeros tambores de miel, de excelente calidad, aptos para la comercialización inmediata.
Agua potable
En el marco del programa se realizó en 2014 una obra de agua potable para la etnia huarpe denominada +Juan Manuel Villegas+, en el departamento provincial de Lavalle. El proyecto demandó una inversión de $ 1.400.000 que fueron aportados por el PRODEAR, el Gobierno Provincial, la Municipalidad de Lavalle y parte también por los mismos beneficiarios.
Mediante este proyecto se construyeron 30 kilómetros de red troncal, integrándola al Acueducto del Desierto. Asimismo, se proveyó a la comunidad de un reservorio, seis paneles solares, una estación de bombeo y las conexiones domiciliarias necesarias para concretar el proyecto, cuyo objetivo es contribuir a mejorar la calidad de vida de los integrantes de la etnia huarpe y fomentar el arraigo en el desierto lavallino, permitiendo que 21 familias de esta comunidad de San José dispongan, por primera vez, del servicio de agua potable en sus puestos.
Con una comunidad escolarizada, luego de haber conseguido el acceso al agua, trabajaron realizando zanjas para el agua potable, garantizando el acceso en la zona del desierto. Tiempo después se capacitaron en apicultura y a fines de diciembre de 2015 lograron producir los primero barriles de 300 kg cada uno. También realizan trabajos de artesanías, con diferentes materiales, que están comercializando de a poco.
Financiado por el Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), su finalidad fue contribuir a la cohesión e inclusión social y productiva de los habitantes del sector rural de Argentina, promoviendo la creación de condiciones para un desarrollo sostenible de las áreas rurales en el marco de las economías regionales.
En 5 años de ejecución, este programa benefició a más de 17.000 familias que lograron mejorar su calidad de vida en al ámbito rural. Sus acciones fueron registradas en el libro Riqueza Latente IV y pueden verse también contadas por los beneficiarios en el vídeo institucional del Programa.