Bariloche es una de esas ciudades que siempre sorprende. Y no importa si uno ya viajó y recorrió el lugar de una punta a la otra. Siempre, hay algo nuevo, especialmente para quienes buscan actividades vinculadas a la naturaleza ya que la ciudad cabecera de Río Negro tiene paisajes, operadores, oferta turística e infraestructura de sobra alrededor de un magnífico entorno natural único como es el Parque Nacional Nahuel Huapi. Justamente este es el centro de miles de actividades, para todo tipo de turistas que llegan a este destino. Estas son las 12 actividades imperdibles de este verano:

1) Paseo a Puerto Blest y Lago Frías en catamarán. 

Puerto Blest es un pequeño Puerto ubicado sobre el Lago Nahuel Huapi, en el extremo del Brazo Blest (donde están los cerros Capital y Millaqueo y la Isla Centinela, que aloja la tumba de Francisco Pascasio Moreno, más conocido como Perito Moreno) y sobre la desembocadura del río Frías. Forma parte de un Paseo turístico que une la ciudad de Bariloche con el Lago Frías y la cascada los Cántaros. Para llegar hasta este punto se debe hacer una excursión lacustre desde Puerto Pañuelos y desde el camino observar cómo cambia el ecosistema y se adentra hacia la fresca selva valdiviana. Este es un trayecto del mítico Cruce Andino.
en proximidades del embarcadero hay una hostería, un centro de interpretación de la fauna y flora de Parques nacionales, y varios senderos que permiten recorrer la zona. 

2) Día de playa en los lagos cristalinos del Parque Nacional Nahuel Huapi y Kayak.

Entre las cercanías del centro barilochense y el Río Manso, se encuentran los lagos Nahuel Huapi, Moreno, Gutiérrez, Mascardi, Guillelmo, Steffen y Martin. En todos estos espejos se puede disfrutar de maravillosas playas de aguas transparentes y acampar en los predios autorizados. Además, se puede hacer travesías en kayak y divertirse conociendo las costas y profundidades de los lagos.

3) Subir a un refugio de montaña. 

Hay cuatro emblemáticos: Refugio López, el Manfredo Segre (Laguna Negra), Frey y General San Martín (Jakob) y los del Cerro Tronador: el Rocca, Ilon y Otto Meiling.

Múltiples senderos llevan a los refugios más emblemáticos de este destino, también conocidos por la famosa carrera de los 4 refugios del Club Andino Bariloche. Estos son el R. López (Cerro López), el R. Frey (Cerro Catedral), el R. San Martín (Laguna Jakob) y el R. Italia Manfredo Segre (Laguna Negra, es Cerro Negro). Todos ellos aptos para caminantes de nivel medio.

Al Cerro Tronador se le dio su nombre por el sonido a trueno que generan los desprendimientos de sus siete glaciares. Al pie de este cerro se abren múltiples senderos que llevan a cascadas, lagunas turquesas, glaciares y a los refugios de montaña, entre ellos, Refugio Ilon, el R. Otto Meiling y el R. Agostino Rocca, en la ruta del Paso de las Nubes.

4) Visitar el Bosque de Arrayanes e Isla Victoria.

Este recorrido lacustre lleva al viajero a conocer la península de Quetrihue, donde está el Bosque de Arrayanes. Luego, se navega hasta el Puerto Anchorena de la Isla Victoria, mientras se observa toda la Cordillera de los Andes. Recorriendo sus senderos se llega a la Playa de Toro y se pueden conocer las pinturas rupestres hechas por los pueblos originarios que habitaron la zona. Ahí se puede pasar el día en las playas de arena volcánica y la noche en el glamping o en la hostería de la isla, una experiencia inolvidable.

5) Cabalgatas atravesando bosques, mallines y estepa patagónica.

La experiencia de recorrer a caballo y contemplar los escenarios boscosos, los humedales o mallines inundados y la inmensa estepa y sus peculiares formaciones rocosas es de las más memorables que uno puede llevarse del lugar como recuerdo.

6) Canopy y aventura.

Para las personas aventureras y amantes de la adrenalina y la naturaleza, hay varias opciones. Hay circuitos de canopy o tirolesa (básicamente consiste en una polea suspendida por cables montados en un declive o inclinación que permite tener una visión única) para hacer durante el día, y ahora también ¡nocturnos! El canopy propone otra manera de descubrir la naturaleza, en familia o con amigos: la increíble sensación de volar a través del bosque, contemplando asombrosos paisajes que serían imposibles de apreciar desde el suelo. En Bariloche se encuentra uno de los recorridos más largos de América del Sur, su total es de 1500 metros.

Por ejemplo hacer canopy en el Cerro López (incluye el transporte desde el alojamiento hacia el lugar y guía) cuesta $11.800 por persona y para los niños entre 8 y 12 años, $10.800.

La actividad tiene una duración de 3 horas y media porque hay un circuito de 10 plataformas conectadas por un sistema de tirolesas de cable de acero, con los que se podrá volar a través de los árboles de la Patagonia argentina.

7) Trekking.

La caminata, o trekking, se puede realizar por numerosos senderos en Bariloche. Esta actividad no exige experiencia previa cuando se practica bajo la supervisión de un guía de alta montaña, pero sí requiere de un nivel físico aceptable y una buena predisposición hacia las eventualidades que puedan surgir en cada expedición. Es fundamental obtener información precisa sobre el estado de los senderos y sus diferentes niveles de dificultad. Además, si el recorrido se encuentra dentro del parque nacional Nahuel Huapi, es necesario realizar el registro de trekking con anticipación. Hay múltiples opciones de senderos habilitados para todos los niveles de dificultad. Se puede encontrar información en la página Bariloche Trekking.

8) Rafting o flotadas en los ríos.

El límite sur del Parque Nacional Nahuel Huapi está marcado por el Río Manso, en el que se pueden realizar travesías de rafting, rodeadas de bosque andino patagónico, y refrescarse en los piletones que se forman en su recorrido. También se pueden hacer flotadas en el río Limay, atravesando la estepa y las formaciones rocosas del entorno.

9) Navegar en velero por el Nahuel Huapi.

Desde Bahía López hacia el Brazo Tristeza, desde muelles hacia el Brazo Campanario, desde Puerto Pañuelo hacia Isla Victoria: Múltiples paseos para disfrutar del Lago en un velero. Los vientos constantes del incomparable Nahuel Huapi convierten a este Lago en un verdadero paraíso para navegantes. Rincones exclusivos a los que sólo se puede llegar en barco, solitarias bahías ocultas y hermosas playas de ensueño para bañarse y relajarse.

10) Circuito Chico.

Es el recorrido más tradicional de Bariloche, que atraviesa bosques, lagos y montañas. En el trayecto se pueden hacer distintas paradas en la Capilla San Eduardo, miradores con vistas panorámicas, senderos de dificultad baja, como el bosque de Arrayanes, el Cerro Llao Llao o al mirador Brazo Tristeza, y playas para descansar, como Villa Tacul o Bahía Los Troncos.

 11) Degustar la gastronomía tradicional incluyendo chocolates, cordero, cervezas, curanto, trucha, ahumados, frutos rojos.

La gastronomía de este destino es toda una experiencia en sí misma. Los chefs más reconocidos de la región se lucen con los platos de comidas típicas. Las chocolaterías sorprenden con su arte dulce. Los maestros cerveceros se inspiran en los frutos patagónicos y los paisajes para crear nuevas variedades de cervezas. En Colonia Suiza se puede apreciar el ritual del curanto que nobleza obliga decirlo merece un capítulo aparte ya que hay que organizarse para ir a uno de estos tradicionales rituales donde se colocan todo tipo de verduras y los trozos de carne (como pollo, carne de vaca y hasta cordero) para que se cocinen bajo tierra. Esta comida típicamente heredada de la costa chilena y de origen araucano, se hace a muy pocos kilómetros de Bariloche (a 24 kilómetros aproximadamente), sólo los días miércoles y domingos. Curanto significa piedra caliente. En esta localidad además de esta comida, se puede probar cerveza artesanal, se puede visitar casas de té y repostería, e inclusive en la feria de artesanos se consiguen excelentes ahumados y dulces regionales. Los principales atractivos de zonas cercanas son una pequeña capilla, el Museo de los Viejos Colonos y algunas playitas sobre el Lago Perito Moreno.

Un dato más: desde mañana lunes y hasta el próximo sábado 11 de febrero tendrá lugar la cuarta edición del Festival de la Cerveza Artesanal, una semana para dedicar a disfrutar la mejor cerveza del país y recorrer las cervecerías más emblemáticas de la ciudad que abren las puertas para conocer sus fábricas por medio de visitas guiadas y hacer degustaciones de bebidas exclusivas y buena gastronomía, incluidas tapas que están en promoción para el evento. 

Tan esperado es este festival que hasta hicieron una cerveza emblema de esta convocatoria. Algunas de las marcas participantes son Blest, Berlina, Antares, Patagonia, La Cruz, Diuka, entre otras.

El cierre, los días 10 y 11 de febrero, hay fiestas -de 18 a 1 de la madrugada- con 60 canillas de cerveza, comida y bandas locales y nacionales en la base del Cerro Catedral. 

El Festival de la Cerveza Artesanal Bariloche es organizado por la Asociación de Cerveceros Artesanales de Bariloche y Zona Andina (ACAB) con el apoyo de la Cámara de Comercio e Industria de Bariloche, el Emprotur, el Gobierno de Río Negro y la Municipalidad de Bariloche.

Por todo esto, nadie puede irse de Bariloche sin probar los mejores sabores.

12) Pasear en el tren patagónico y La Trochita. 

El Tren Patagónico realiza un viaje entre la cordillera y la estepa. Es un nuevo imperdible para realizar desde Bariloche. Plan perfecto para cerrar el día y contemplar la transición entre dos paisajes al atardecer. Parte de la imponente cordillera con sus altas cumbres, los lagos y ríos y va hacia la estepa, un paisaje completamente diferente donde la inmensidad y la paz son protagonistas. Una excursión para toda la familia, en la que grandes y chicos podrán conocer otros paisajes rionegrinos y disfrutar de una cena de asado criollo con opciones vegetarianas, celíacas y veganas en la estancia de la Estación Perito Moreno.

Los pasajes del servicio turístico a Estación Perito Moreno tienen un valor aproximado de $8.700 para Residentes en Río Negro y $17.100 para No Residentes.

Salen de la Estación Bariloche los días miércoles, jueves, viernes y sábados a las 19:15 horas, llegando a la Estación Perito Moreno a las 20:06 horas. Luego de la cena y las observaciones con telescopios ubicados en las inmediaciones del lugar donde se hace la parada, la vuelta es alrededor de las 23:30 horas.

A su vez, la otra opción, la de La Trochita es un verdadero museo viviente y rodante, que brinda la posibilidad de ser parte de la historia. Las primeras locomotoras son centenarias y los antiguos vagones de pasajeros y el coche comedor reconstruido por los trabajadores del tren, harán de esta excursión una experiencia inolvidable. La aventura comienza en Ingeniero Jacobacci, una de las cabeceras del recorrido completo del histórico tren. Hay guías locales que acompañan a los pasajeros durante todo el recorrido, de aproximadamente unos 43 kilómetros hasta llegar al paraje Ojos de Agua. Se puede recorrer el pequeño poblado y disfrutar de la tranquilidad del lugar. Luego de aproximadamente una hora, el tren partirá nuevamente hasta Ing. Jacobacci.

Para más información:
barilocheturismo.gob.ar
Facebook: Bariloche Patagonia Argentina
Instagram: @barilochear
Twitter @bariloche_ar
Youtube Bariloche Argentina
Pinterest: Bariloche Argentina
Fuente: Jennifer Alonso Axon Latam Comunicación

Por Paulina Rotman
Fotos: colaboración Jennifer Alonso de Axon Latam Comunicación