El Ministro de Minería de San Juan, Felipe Saavedra, acompañó recientemente una comitiva mendocina organizada por la empresa que maneja el proyecto minero San Carlos (ubicado en al vecina provincia) para conocer Macedonia. La intención de la empresa fue que los visitantes pudieran interiorizarse en la forma en que este país balcánico ha logrado hacer convivir agricultura y minería en una misma zona productiva. La misión mendocina recorrió los viñedos de una bodega de alta gama que se encuentra a tan solo 10 kilómetros del tajo de la mina Bucim, un yacimiento a cielo abierto que explota minerales de cobre y cinc. La invitación a la máxima autoridad minera de San Juan no pasó desapercibida, ya que desde las altas esferas de las empresas rusa que compraron el proyecto a Coro Mining saben que de no conseguir el aval legislativo y social para desarrollar íntegramente el proyecto San Carlos en Mendoza, deberán implementar el plan “B”, que consiste en extraer la roca con el mineral crudo en el yacimiento de Uspallata, molerlo y transportarlo por tren hacia la provincia de San Juan, donde se haría el proceso de flotación para extraer el cobre.

El grupo de funcionarios elegidos para conocer la integración agroindustrial de Macedonia no fue al azar. Fueron representantes de las áreas que tienen a cargo la evaluación del proyecto San Jorge y legisladores que, de acuerdo a la ley 7722, también tendrán que levantar la mano por el sí o el no de la nueva Declaración de Impacto Ambiental.