Gimnasio Kalchaka
 

Localizado en las orillas del río Dniper en Kiev (Ucrania) fue fundado hace 37 años. Lo particular son sus 200 "máquinas": están ubicadas a la intemperie y elaboradas por fragmentos elaborados por piezas que son casi chatarras. Se lo considera como el gimnasio más duro del planeta. Aunque es de uso gratuito, normalmente acuden hombres y solo pocas mujeres.

David Barton Gym
 

Con música a todo volumen, luces de colores, barras y otras decoraciones la atmósfera se asemeja más a un club nocturno que a un centro de entrenamiento. Entre las instalaciones también se ofrece un sauna. En tanto, siempre hay un DJ que levanta el ambiente. El lugar dispone de diferentes modalidades para los atletas: pesas, yoga, pilates, boxeo, ciclismo y lucha, entre otros.

Debido a la dura competencia, la cadena se redujo a tres inmuebles: cerró ocho locales, como en Nueva York, Miami, Chicago, Boston y Seattle.

The Green Microgym
 


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Prototipos de bicicletas estáticas y cintas para correr que alimentan de energía al complejo sustentable, mientras los clientes se entrenan. Con solamente cuatro rodados se pueden generar entre 150 y 450 W por hora, dependiendo de la intensidad del pedaleo del ciclista. Por este motivo, la cuota es baja. En su modo eco-friendly, también dispone de los tradicionales paneles solares y de un sistema de ventilación eficiente. La cadena consta de tres centros, todos ubicados en Portland, Estados Unidos.

The Third Space
 

Ubicado en la zona de Soho, en la ciudad londinense de Westminster, tiene varios pisos con un muro de escalada, ring de boxeo y una cámara de hipoxia que simula el entrenamiento en altura y los cambios de presión. Al margen, una amplia gama de actividades y tratamientos físicos y médicos: fisioterapia, acupuntura, hidroterapia, aromaterapia, podología deportiva.

París Navigating Gym
 

El más excéntrico todavía está en proceso. La base será un bote flotante que navegará por las aguas del río Sena, en Francia, de modo que quienes se ejerciten podrán disfrutar de una bella panorámica, con la Torre Eiffel de fondo. Con paredes de cristales, tendrá veinte metros de largo y una capacidad para 45 personas.

En cuanto a su modo de funcionamiento, también utiliza la energía humana. Las máquinas, principalmente bicicletas estáticas, están conectadas a un inversor, que convierte la energía empleada por los clientes en electricidad que hace funcionar el barco. Esperan terminarlo en los próximos meses. Además de utilizarse como gimnasio, se alquilará para fiestas privadas.