No todas las tartas son dulces, y no todas las personalidades encajan con una de frutas o chocolate. En el mundo de las tartas saladas hay tantas combinaciones como tipos de personas. Ingredientes clásicos, mezclas inesperadas y rellenos potentes: cada mes del año puede reflejarse en una receta que, como vos, tiene su carácter propio. Acá, una guía mes a mes para descubrir qué tarta sos.

Enero – Tarta de choclo y cebolla

Frescos, resolutivos y con mucha energía. Como el verano, van al grano y transmiten alegría. El choclo dulce con la cebolla apenas dorada los representa.

Febrero – Tarta caprese (tomate, albahaca y mozzarella)

Modernos, espontáneos y con un toque romántico. Amantes de lo simple pero sabroso. No necesitan mucho para destacar.

Marzo – Tarta de espinaca y ricota

Sensibles, introspectivos nutritivos para los demás. Clásicos de confianza, siempre caen bien.

Abril – Tarta de calabaza y queso

Creativos, afectuosos suaves. Tienen una dulzura natural, pero saben sorprender con intensidad.

Mayo – Tarta de puerro y queso

Elegantes, discretos consistentes. No son escandalosos, pero sí inolvidables. El puerro, con su sabor delicado, es ideal para ellos.

Junio – Tarta de pollo y verduritas

Equilibrados, protectores y prácticos. Son de los que solucionan todo y alimentan con el alma.

Julio – Tarta de jamón y queso

Clásicos, confiables y muy sociables. No fallan nunca, y están en todas las mesas.

Agosto – Tarta de carne picada y morrón

Intensos, frontales y con mucha presencia. Les gusta lo potente y no se andan con vueltas.

Septiembre – Tarta de brócoli y queso crema

Exigentes, meticulosos y sofisticados. Van más allá de lo obvio y disfrutan de lo saludable con estilo.

Octubre – Tarta de cebolla caramelizada y queso azul

Apasionados, originales y con un gusto muy definido. No les gusta pasar desapercibidos.

Noviembre – Tarta de berenjena y tomate

Profundos, intensos y a veces subestimados. Como este relleno, sorprenden con capas y matices.

Diciembre – Tarta de atún

Versátiles, viajeros y prácticos. Están en movimiento y siempre listos para lo que venga, con sabor propio.

¿Sos más verdura, más queso o más proteína? El mes en que naciste puede tener más influencia en tus gustos de lo que pensabas.