En su segundo día en Yakarta la presidenta Cristina Fernández combinó ayer glamour en la cena de gala en el Palacio de Gobierno con una larga lista de dificultades, con calles cortadas y caos vial por las inundaciones provocadas por la mayor lluvia en 5 años en la capital de Indonesia.
La mandataria argentina deslumbró en la cena realizada en el Palacio presidencial que la tuvo como principal homenajeada ya que se la distinguió con todos los honores, destacándose la importante presencia de mujeres indonesias.
La cena se desarrolló en uno de los salones de la sede de Gobierno, donde se mostraron espectáculos típicos de la danza y la música indonesia, aunque también se cantó música argentina.
La mesa principal tuvo como figuras centrales a Cristina y su par de Indonesia, Susilo Yudhoyono, acompañados por el canciller Héctor Timerman, el secretario de Comunicación Alfredo Scoccimarro, la esposa del presidente indonesio y otros miembros del gabinete local.
La mesa principal, que era rectangular a diferencia del resto, se ubicó a espaldas del resto de las 25 mesas redondas que completaban el salón, de frente al escenario.
La Presidenta estuvo a la altura de las circunstancias ataviada en un atuendo sobrio y elegante.
Cristina lució un majestuoso vestido negro con mangas largas transparentes que incluían finos detalles brillantes. Acompañó el atuendo con un peinado con pelo recogido. En tanto que las mujeres indonesias llevaron coloridos vestidos de la tradicional tela de batik, con peinados cuidadosamente armados y recogidos que desafiaron a la lluvia que no cesó ayer en Yakarta y que dejó muertos por las inundaciones.
En el escenario elegido para la gala predominaban arreglos de plantas tropicales y canastos con frutas, y un tapiz negro en el fondo en el que se veían las islas que integran la República Indonesia bordadas en dorado.
El resto de las mesas estaban ocupadas por funcionarios y diplomáticos de ambos países, y también delegaciones de empresarios de Argentina e Indonesia.
En el menú fueron protagonistas los platos de la cocina internacional, con algunos detalles de la cocina indonesia.
El menú de la Presidenta incluyó una ensalada Ceasar de entrada, una sopa Bagor (típico indonesio), un plato central con pescado, verduras y champignon, y rodajas de frutas con helado de postre, acompañado de agua mineral.
El salón en el que se desarrolló la cena tenía en el centro una gran alfombra roja, inmensas arañas de cristales, paredes blancas y sillas doradas, con algunos adornos típicos de la cultura indonesia.